Locales | 29 Abr El Dr. Rodolfo Canabal, destacado columnista de EL TELEGRAFO, fue distinguido internacionalmente con el “Premio UIBA a una trayectoria de vida al servicio del Derecho”, como reconocimiento a su proficua labor de casi seis décadas en esta profesión.
Los abogados Luis Ortiz Quiroga, Arnoldo Ortiz Moscoso, Roberto Busato, Carlos Andreucci y Javier Quijano Baz, fueron designados por la Junta de Delegados de la Unión Iberoamericana de Colegios de Abogados (UIBA) para integrar el jurado encargado de seleccionar al profesional que fuera merecedor de este premio, en el marco del XIX Congreso celebrado en la ciudad de México del 20 al 23 de este mes.
Canabal fue elegido tras analizarse detenidamente los expedientes de los siete candidatos propuestos por diversos colegios de abogados miembros de la Unión, señala la resolución, la que agrega que “tras un amplio cambio de impresiones, reconociendo los méritos de cada uno de los juristas propuestos, a verdad sabida y buena fe guardada, resolvió asignarlo al destacado abogado Dr. Rodolfo Canabal, propuesto por el Colegio de Abogados del Uruguay, en atención a sus relevantes méritos como jurista en su larga trayectoria profesional de más de de seis décadas”.
El Dr. Rodolfo Canabal, de 91 años y con plena lucidez y capacidad de trabajo, como surge de sus artículos que publicamos todos los martes, en diálogo con El TELEGRAFO expuso su sorpresa y satisfacción por la distinción de que ha sido objeto a través del Congreso celebrado en México.
El destacado profesional presidió desde 1981 a 1985 el Colegio de Abogados del Uruguay y ha trabajado en numerosas comisiones y grupos de defensa de los derechos humanos. Fue además defensor del desaparecido líder nacionalista Wilson Ferreira Aldunate cuando fue encarcelado por la dictadura y estuvo en Paysandú en más de una oportunidad, una de las cuales con motivo de celebrarse en nuestra ciudad la convención del Partido Nacional días previos al plebiscito de reforma constitucional del 30 de noviembre de 1980, en el que Canabal fue defensor de la posición del No, que a la postre resultara ganadora en esa instancia.
Fue asimismo presidente de la Agrupación Universitaria, en el marco de la actividad gremial desarrollada desde 1962, y tras el cese en la presidencia del Colegio de Abogados sigue integrando actualmente comisiones de trabajo de la entidad, incluyendo el Tribunal de Honor del colegio y comisión de colegiación de la Agrupación Universitaria.