Locales | 27 Abr En moción conjunta de los ediles Nilda Belvisi del Partido Colorado y José Oneto del Frente Amplio, plantean la necesidad de considerar la construcción de un nuevo edificio para ubicar el Ciclo Básico de UTU. En sus fundamentaciones los curules refieren a la historia de la enseñanza técnica en el Uruguay, “desde su habilitación en 1890 como Escuela de Artes y Oficios, más adelante con la Ley 5.463 del 12 de julio de 1916 que estableció la Enseñanza Pública Industrial, dando origen definitivo a partir de 1942 a la Universidad del Trabajo del Uruguay, hoy conformada con el nombre de Consejo Técnico Profesional. Nuestro departamento no estuvo ajeno a estos adelantos: hombres y mujeres visionarios que seguramente serían parte de la historia del movimiento industrial de la decáda de 1950-60, fueron formados a partir del año 1921 en aquel viejo local de Avenida Brasil y Paz, cuyo fundador y director fue José Fortunatto”.
“El local de la Escuela Industrial en la zona portuaria -recuerdan- funcionó hasta el año 1941, fecha que marca el traslado al actual edificio cuyo nombre, a partir de 1998, por Ley 15.993, es ‘Arq. Leonardo Bulanti Ríos’, figura de Paysandú que dio todo por la causa. Han transcurrido casi setenta años del funcionamiento en el actual edificio (Montecaseros, Leandro Gómez y Sarandí) y la realidad indica y convoca a que en Paysandú se sigan formando futuros técnicos. Para ello, entre otras cosas, debe contarse con centros educativos funcionales y desconcentrados en la zona urbana. Existen aquí muchos estudiantes deseosos de participar de la oferta educativa de UTU que deben elegir otras opciones, porque la ‘Escuela Industrial de Paysandú’ no tiene capacidad locativa para albergarlos, frustrando la legítima opción de los jóvenes”.
Construir en la zona norte
Belvisi y Oneto señalan que “más allá de los esfuerzos realizados por las autoridades de UTU para conseguir lugares en otros centros educativos para dictar sus clases, sería imprescindible que la ‘Escuela Industrial’ tuviera sus propios locales, como lo tiene -por ejemplo- el Instituto Técnico Superior en la calle Sarandí. Por otro lado, se justificaría dado que Paysandú fue el departamento de mayor crecimiento de matrícula en los últimos años. En este 2010 ingresaron 200 estudiantes al Ciclo Básico Técnico (CBT), aunque otros tantos no pudieron acceder y solamente los tres años del CBT totalizan 480 alumnos distribuidos en 17 grupos”.
Aclaran los ediles que se permiten “indicar que la construcción de un futuro edificio en la zona de barrios cooperativos, predio lindero al de las escuelas 57 y 101 en el norte de la ciudad, permitiría el traslado de los 180 alumnos de los cursos de turismo y administración que hoy se encuentran funcionando en el Liceo 3, su personal administrativo y de servicios. En la década de 1990-2000 se pensaba ya en este proyecto, donde posteriormente se construyó dicho liceo y el Jardín 103, que distan trescientos metros del sitio propuesto por nosotros”.
Sostienen que “la construcción de una nueva Escuela Técnica podría absorber la demanda estudiantil de toda esta zona densamente poblada y a su vez, alimentaría las carreras técnicas superiores. Hoy el edificio de calle Montecaseros está recibiendo una población de más de 2.000 jóvenes, demostrando la demanda que la educación técnico profesional es valorada en todos los ámbitos de la producción y del trabajo como clave del crecimiento del país. A la vez, las personas de menor nivel educativo son las más afectadas por el desempleo, por lo que es un verdadero desafío diseñar políticas educativas dirigidas a satisfacer el mercado de trabajo. Actualmente UTU está en condiciones de brindar mejores posibilidades al estudiante y quien ha culminado el Ciclo Básico puede acceder al Bachillerato Tecnológico, que lo capacitan con tecnicaturas para conducir y ejecutar tareas en áreas específicas”.