Locales | 07 May BASE CIENTÍFICA ANTÁRTICA ARTIGAS, Isla Rey Jorge (Por Lorena Castellano Rivero). -Las tareas científicas y técnicas se finalizaron en la víspera en la Base Artigas, y al final de la jornada el jefe de base entregó un diploma de reconocimiento por las labores y la convivencia con la dotación permanente.
El sanducero Pablo Rivoir, liceal ganador del Concurso del Saber Antártico 2009, optó en la mañana por acompañar nuevamente a los científicos, quienes finalizaron en la jornada la toma de muestras para sus correspondientes investigaciones. Tanto científicos como técnicos terminaron las tareas proyectadas, y muchos ya prepararon sus equipos para el retorno a Montevideo. Si el clima es el apropiado, la misión podría mañana partir hacia la ciudad chilena Punta Arenas.
Mientras, EL TELEGRAFO se trasladó con integrantes militares y técnicos de la misión hacia Villa Las Estrellas, próxima a la Base Aérea Antártica “Presidente Frei”, donde visitó la Escuela F 50 y conoció a sus maestros y alumnos. En tanto, los militares y técnicos uruguayos se interiorizaron con sus pares chilenos sobre la instalación de tanques de combustible.
¿LOCURA EN LA ANTÁRTIDA?
En la tarde hubo tiempo y ganas para las bromas y sentir el frío antártico. Cuando a las 15 la sensación térmica –efecto combinado de la temperatura de 4,4 grados bajo cero y el viento de 20 kilómetros en la hora—alcanzaba los 15 grados bajo cero, un grupo de jóvenes investigadores y Pablo Rivoir se animaron a vestir sus camisetas de Peñarol o quitarse el abrigo y posar por unos segundos para las fotos. Una locura antártica que quedará para el recuerdo.
Por la noche, fue el momento de la despedida formal. En un breve acto, el jefe de base, teniente coronel Ricardo Saravia, agradeció la labor de todos los miembros de la misión en las tareas de mantenimiento, así como la presencia de EL TELEGRAFO y VTV. También agradeció a quienes realizan las diferentes tareas desde el Instituto Antártico Uruguayo para el correcto funcionamiento de la base.
Durante una semana, los miembros de la misión realizaron tareas de mantenimiento para poner a punto la base esperando la invernada. Personal de UTE realizó mantenimiento general de los cuatro generadores del ente, mientras que el de Antel hizo lo propio en los equipos de telefonía e Internet. También se reparó el incinerador de residuos y se colocó el motor –reparado en Montevideo—en uno de los carries todo terreno de la base.
Se instalaron además nuevos sensores en el sistema de detección de incendios, y se efectuó el mantenimiento general de equipos de comunicaciones y las antenas correspondientes, así como de ambas cámaras de refrigeración, y de las líneas de cañería de agua potable.
La jornada finalizó con una fiesta de despedida, en la que el comedor se transformó en un lugar de fiesta, bromas, música uruguaya y alegría. Hoy las tareas se abocarán a la preparación del regreso, que se efectuará posiblemente mañana.