Locales | 12 May “Este plan tiene diversas áreas de trabajo, y hay un área que refiere a la contaminación costera en la cual se analiza el origen de esa contaminación, terrestre, de las fuentes puntuales de contaminación, como pueden ser los vertidos que se hacen en las ciudades hacia el río, las fuentes difusas, que son por ejemplo una mala recolección de residuos, el arrastre que generan esas aguas y que terminan por la vía de las calles urbanas en el río, y otra de origen acuático, como puede ser por algunas embarcaciones o las operaciones portuarias o los efectos de la navegación”, indicó el ex presidente de CARU al exponer los alcances de la iniciativa.
“Otra área es la recreación y el turismo, y así se prevé preservar todo lo que tiene que ver con el uso de las playas o la calidad de las aguas”, señaló.
“Hemos hablado en más de una oportunidad sobre lo importante que sería tener un parque binacional con áreas protegidas, porque eso también hace a este plan de protección ambiental del río Uruguay, en tanto otra área de trabajo es la afectación de áreas costeras, la erosión en cuanto a las inundaciones, la prevención de lo que puede suceder en los movimientos de la cota generada en Salto Grande, y un área de información ambiental y de fortalecimiento institucional”, apuntó Belvisi. “Para llevar a la práctica este plan que firmamos todos en 2002, el 29 de octubre, hay una estructura operativa, con un organigrama, que tiene un comité de dirección con los titulares de los catorce gobiernos locales más las autoridades de CARU, así como una parte operativa con un comité asesor técnico, un comité asesor ciudadano, e involucrando a la sociedad civil, en la tarea de protección ambiental del río Uruguay”, expuso.
“Es decir que realmente vemos que hay una enfoque integral del río Uruguay y hay inquietudes de los presidentes y como se está abriendo la posibilidad de ampliar el enfoque del río Uruguay y la protección, creemos que este sería un trabajo importante, que tiene primero la voluntad coincidente de todos los gobiernos locales de la margen argentina y uruguaya y se dio en el ámbito de la CARU. Y como hoy se habla en la Corte de la Haya de que hay que fortalecer los procedimientos y lo que hizo la CARU, este documento es un plan que hay que ponerlo en práctica, que marca el camino e involucra a todos los actores, con un enfoque integral para la protección del río Uruguay. Sería un buen elemento de arranque para ponerlo en práctica entre los dos países”, reflexionó el entrevistado.