Deportes | 17 May  El clásico entre Nacional y Peñarol, válido por la segunda final por el Campeonato Uruguayo se jugará mañana a las 16 horas, según quedó establecido en  la víspera tras la reunión llevada a cabo entre los dirigentes de ambos clubes y el subsecretario del Ministerio del Interior, Jorge Vázquez.
Los hechos de violencia suscitados en el partido del pasado miércoles –que desencadenó la disputa de las finales-- llevaron a que los trabajadores del transporte hicieran paro el sábado, cuando se jugó la primera final. Y anunciaron que, en caso de que el segundo partido a jugarse mañana se fijara a la noche, repetirían la medida.
Esto llevó a que se realizara una reunión finalizado el compromiso del sábado, definiéndose que la segunda final se desarrollaría mañana, pero restando por conocer cuál sería el horario del partido.
Finalmente se determinó que el choque irá a las 16, según sugirió el Ministerio, con el objetivo de brindar mayor seguridad, en contra de los intereses económicos de los clubes que querían que el pleito se desarrollara a las 20.30 con el objetivo de asegurarse una mayor concurrencia.
 Concentrados
 Mientras tanto, Peñarol y Nacional comienzan hoy a definir los equipos de cara al choque de mañana. Ambas escuadras tendrán bajas para el compromiso, teniendo en cuenta las cuatro expulsiones registradas en la primera final del Uruguayo.
Peñarol tendrá una ausencia sensible si se tiene en cuenta el rendimiento que tuvo a lo largo del Clausura Jonathan Urretaviscaya, más allá de que en los dos clásicos anteriores no pesó en el terreno de juego.
Además, los carboneros no contarán con Ruben Olivera. Por su parte, se espera la recuperación de Antonio Pacheco, autor del único gol del compromiso jugado el pasado sábado.
“Hicimos un buen partido, creo que ganamos merecidamente ante un rival que luchó mucho, aunque sobre el final del partido pretendíamos otro gol porque estas finales no son partidos independientes. Pero no es fácil”, dijo tras la primera final el entrenador Diego Aguirre.
Nacional, que tendrá al entrenador Eduardo Acevedo dirigiendo desde afuera de la cancha ya que fue expulsado, no podrá contar con Matías Cabrera y Maximiliano Calzada, dos que ingresaron a lo largo del primer partido y estuvieron pocos minutos en el terreno tras ser expulsados.
Entre los golpeados está Angel Morales, pero se espera que pueda ser de la partida en el compromiso de mañana.
“No logramos imponer el juego que pretendíamos y creo que las expulsiones complicaron la función del equipo”, dijo Oscar Morales tras el choque del sábado.
“No estamos en igualdad porque perdimos el primer partido, por lo que ahora partimos de la base que tenemos que anotar un gol y no tenemos que jugar con nerviosismo”, agregó.