Locales | 27 May El Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos (Sunca) realizó el martes un acto en recuerdo de las víctimas del fatal derrumbe ocurrido el 25 de mayo de 1987, donde hoy funciona la planta de Azucitrus. En la plazoleta “25 de Mayo”, ubicada en avenida Doctor Roldán y calle Nº 31, se ofició una misa conmemorativa, a cargo del sacerdote Julio Martínez, de la parroquia San José Obrero. Integrantes del gremio de la construcción, familiares de las fallecidos y obreros retirados que fueron partícipes del accidente estuvieron presentes en la ceremonia.
Carlos González, dirigente del Sunca, manifestó a EL TELEGRAFO que “se conmemoró un año más del fatal accidente de la obra de construcción de la planta que hoy día es Azucitrus, ya que en ese momento aún la empresa no estaba funcionando, sino que operaba en el terreno la constructora Dieste y Montañez S.A. Evidentemente que para nosotros es un día de reflexión y de encuentro entre los trabajadores respecto al tema de seguridad e higiene de la industria, y por ello es que cada 25 de mayo los recordamos en esta instancia”.
“Nosotros como sindicato tenemos un eslogan, el cual es que ‘tenemos que salir vivos de nuestras casas para poder retornar de igual manera’, y siempre intentamos inculcarle a los trabajadores que hay que cuidarse entre todos y poder salvaguardar nuestra seguridad, ya que en cada obra que se inicia son distintas las condiciones y esta es una industria donde verdaderamente el trabajo es riesgoso”, dijo González.
El momento de la tragedia
El fatídico hecho es aún recordado con honda congoja por los sanduceros, principalmente aquellos que en la mañana del martes 25 de mayo de 1987 escucharon un ruido ensordecedor y de inmediato corrieron en procura de rescatar sobrevivientes. El episodio tuvo como saldo la muerte de cinco operarios: Walter Amado López, Juan Sofildo Pintos, Juan Ramón Bergara Bandera, Carlos María Gerardo Pereyra y Amado Aranda, además de 13 heridos.
Aquella mañana ambulancias del Hospital Escuela del Litoral, del Servicio Médico Municipal, de UCEM, del Seguro de Enfermedad de Trabajadores de la ex Norteña, de Ancap, de la Policía Caminera y de las empresas fúnebres San José y Martinelli, acudieron en socorro de las víctimas.