Paysandú, Jueves 03 de Junio de 2010
Locales | 30 May En un discurso sin grandes ni novedosas declaraciones, el presidente José Mujica reconoció la importancia del sector agropecuario para el desarrollo del país, abogó por un mayor entendimiento entre los uruguayos que “estamos en el mismo barco”, adelantó que se buscará simplificar los trámites burocráticos que deben cumplir los productores, y dijo que no va a cambiar ni suprimir los feriados. Lo único que prometió es “hacer lo que se pueda”. Por primera vez en Paysandú como presidente, y también en un Congreso de la Federación Rural del Uruguay, y para un auditorio repleto de productores y representantes oficiales y políticos, Mujica comenzó reconociendo que hay problemas en las rutas nacionales, ya que “sé que el día está un poco inhóspito para andar por la carretera, sobre todo por la ruta 5”.
La clase media rural
Se excusó de hablar de temas específicos del sector, ya que lo haría el ministro, “y yo no vine a sustituirlo”. No obstante, afirmó que “los que me conocen saben que tengo mi interpretación de este país”, al cual definió como “esencialmente agroexportador”.
Aclarando que no se tome “como un concepto semánticamente exacto”, definió a la Federación Rural del Uruguay como una organización que “tiende a representar a lo que se puede llamar la clase media rural, que en cierta medida está compuesta por mucha gente de la tierra, y no es lo mismo que gente solo con tierra”.
Dijo que este tipo de gente, “expresa una fisonomía, un tipo de ciudadano, un modo de ser, que no es mejor ni peor pero que es propio, que tiene una identidad. Y que merece un hondo respeto por parte del gobierno, por ello estoy acá. Y quiero transmitirles a los miles que no están, que no pueden estar acá, y a la peonada por ahí entreverada en los galpones”.
La “unidad nacional”
Mujica dijo que “este país (...) necesita honda construcción de unidad nacional, porque no podemos darnos el lujo de atomizarnos”. La definición que dio sobre la unidad nacional fue que “significa tener algunas cosas en común, y tener en común un gran respeto al que es distinto, a lo que es diverso, aquello con lo cual no podemos concordar pero es de acá. Porque unidad nacional no quiere decir que todos seamos y pensemos lo mismo, sino que estamos en el mismo barco, que es otra cosa. Unos tirando de un remo y otros levantando una vela, pero en el mismo barco. Y esto significa tener una apertura enorme, de ser capaces de discrepar pero respetar”.
Reconoció que todos los sectores tienen sus propios intereses y los defienden, “pero hay que aprender a convivir como los pastitos criollos en la pradera. Conforman una unidad, pero cada cual está peleando por su espacio, por su luz, y logran tirar su semillita. Eso significa la unidad en la convivencia”.
Priorizar el
interés general
Por ese reconocimiento de los distintos intereses, el presidente afirmó que “todo gobierno (...) cuando uno prioriza el interés general, tiene lío con todos, porque nunca puede conformar al cien por ciento, a cada una de las partes. De todas maneras sabe que hay cosas que son determinantes”.
Dirigiéndose luego específicamente a los productores agropecuarios, dijo que “sé, paisano, perfectamente, que no estamos en ninguna hora lúgubre. Sé lo que fue el 2001, el 2002, sé lo que fue la crisis penosa del endeudamiento de tantos años. Seétambién lo que fue el auge de los precios casi inverosímiles, y también el asunto de la competitividad”.
Mencionando uno de los temas recurrentes en el reclamo de los exportadores, señaló que “sé la consecuencia que tiene en nuestro país el dólar que se nos tira al suelo, y además los que nos entran de afuera, porque somos un país creíble y vienen a colocarlos. Y resulta que esa abundancia también nos puede perjudicar”.
El valor del surco
José Mujica afirmó que “tenemos confianza en que vamos a seguir navegando. En el fondo la cuestión es, más allá de los pareceres, el valor permanente del surco, de la tierra, están hablando que el campo uruguayo ha aumentado su productividad y que mantiene competitividad a pesar de tener el dólar arrastrado por el suelo. Y reconociendo que ese fenómeno no es infinito ni placentero, tenemos una visión, a pesar de eso, positiva. El punto de vista del horizonte es lo que más nos preocupa, es algo que no sabemos y nadie sabe a ciencia cierta. Las repercusiones que va a tener lo que está pasando en Europa. De todas maneras, el campo uruguayo y los productos de Uruguay han demostrado mil veces una enorme capacidad y solvencia”.
El censo como herramienta
En un giro inesperado, el primer mandatario recordó la realización del censo nacional, al que ligó directamente con la posibilidad de lograr mejoras para el trabajo de los productores agropecuarios.
“Estamos en una época de cambios acelerados. Este es el año del censo, y tenemos que darle pelota, mucha preocupación. El dibujo de la descentralización que comenzó en el Ministerio debe acentuarse y profundizarse en toda la sociedad”. Respecto a eso, abundó diciendo que “debemos caminar hacia un productor que esté debidamente identificado, y que en el futuro pueda hacer el grueso de los trámites apenas con un telefonazo”.
Feriados sí, pero
saber cómo competimos
Terminó su intervención de poco más de 13 minutos, haciendo un llamado a “reírnos un poco en barra”, y relativizó algunas noticias que se publican con referencia a supuestas actitudes o decisiones suyas.
“Hoy miré un diario y me enteré que le prohibí la entrada a 120 tipos del Banco de la República, y no sé que algún presidente tenga semejante poder, porque yo pensé que el Banco de la República era un ente autónomo. Y ayer abrí otro diario, y parece que voy a cortar los feriados. Y un señor dice ‘no, si corta los feriados se va a perjudicar el turismo’”.
“Y yo pensé si para el turismo sería negocio que no trabajáramos más. Ni lo uno ni lo otro, compañeros. Nos pusimos en Presidencia (a analizar) si era un escollo comparativo la cantidad de feriados que tienen el resto de los países con los que estamos compitiendo, y si tiene o no alguna relación con el PBI (Producto Bruto Interno), y cuántos feriados particulares y leyes gremiales que aseguren esto y lo otro. ¡Ni se nos ocurre intervenir en los feriados, porque armamos un lío que Dios me libre! Lo único que queremos es saber”.
Culminó diciendo que “como presidente de la República, fundamentalmente vengo a dos cosas sencillas: a darles un abrazo a los paisanos de mi país y a comprometerme con ellos, y haremos lo que se pueda”.
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