Rurales | 22 Jun La Marcha Funcional de Caballos Criollos que se cumple en Salto tendrá hoy su día clave. Denominada “lima sorda”, es el reinicio después del descanso de ayer y fundamental para encarar lo que sigue hasta el domingo.
Posterior a esta etapa, la actividad del miércoles es regulada, jueves y viernes libres, sábado regulada y se define el domingo en la última etapa libre.
Sin dudas un punto relevante y cada vez más comprobable es el incremento de participación y variedad de jinetes.
Los 95 caballos uruguayos que participaron este año en Marchas Funcionales (la de la Ficcc y esta de Salto) hablan del crecimiento de esta actividad. La cantidad de dueños nuevos que han invertido en genética marchera en realidad son nuevos criadores, que se suman a los que ya están desde hace años y van aumentando cada vez más este tipo de genética que repica en todo el país.
A poco más de una semana de haberse iniciado la 40ª Marcha denominada “Jorge Enrique Grasso”, de los 68 que largaron sólo han parado dos. Es claro que el trabajo anterior a la marcha en el establecimiento, desde que se doma la yegua hasta que se la elige, es determinante.
Participantes
En esta marcha que se disputa en Salto el abanico va desde participantes muy jóvenes hasta los más experimentados, con varios kilómetros sobre el recado. Procuran completar el próximo domingo los 750 kilómetros --con punto de partida y llegada el local de la Agropecuaria salteña-- varios ganadores de esta prueba, como José María del Campo Gigena, Gonzalo Souza, Leandro Rodrigues, Sandro Alvez y Leonardo Urse.
Pero también se encuentran dos experimentados jinetes que disputan por primera vez una marcha, como Alberto Stolovas y el sanducero Carlos Eduardo Parietti Henderson.
Se distinguen cuatro mujeres: está debutando la criadora Sonia Souza; también compite María Angélica Azanza haciendo su primera experiencia a los 17 años y reitera Katy Macedonio, quien ya ha sabido disputar marchas.
Pero el caso más novedoso es el de Genoveva Queau, una francesa que el año pasado vino a Uruguay, compró un caballo “Encerado La Invernada”, y este año volvió y lo está montando.
Antecedentes
La Marcha Funcional de Caballos Criollos surge en la década del 40. Se corren tres sobre 750 kilómetros, con 6 o 7 animales cada una y se corta. Se reanuda en el año 52, hasta el 54. Después los criadores de Cerro Largo, en el año 76, retoman el concepto y corren primero una Marcha de 250 kilómetros y en el 77 corren 500 kilómetros. Luego, desde el año 1979, se vuelve a disputar sobre 750 kilómetros y con los tiempos mínimos impuestos originalmente. Así, desde hace tres décadas se disputa cada año y con mejoras visibles.
etapas
La marcha consta de 11 etapas reguladas y tres libres, con una de descanso en el medio.