Paysandú, Sábado 26 de Junio de 2010

Brincadeiras Políticas

Nacionales | 24 Jun La gata Flora
El coordinador de la bancada del Frente Amplio, diputado Aníbal Pereyra, está molesto con la oposición y considera que es “como la gata Flora” pues nada la conforma. Es que se habla de la menguada producción legislativa de los primeros meses de gobierno y la perspectiva de que eso no cambie demasiado en el corto plazo. Pero, según informó “La República”, las críticas no fueron bien recibidas por Pereyra y respondió: “La oposición es como la gata Flora. Si sacamos muchas leyes se queja y si priorizamos el diálogo y los acuerdos también se queja”. No obstante, admitió la disminución en la tarea legislativa. “Si comparamos la productividad del actual período con la pasada legislatura estamos muy abajo. En realidad, no hay punto de comparación”, dijo.
Claro que, como todo, hay un porqué. La culpa es de la oposición, según Pereyra. “Porque antes decían que nosotros éramos casi como una aplanadora metiendo leyes y leyes, y ahora que optamos por priorizar los acuerdos políticos para que de ellos nazcan proyectos consensuados, también se molestan. No sé qué decir”, dijo.
Manos sin yeso
El diputado Pereyra confesó que la política de la presente administración es lograr acuerdos entre el oficialismo y la oposición antes de redactar proyecto de ley alguno “y eso lleva tiempo porque todo lo que signifique diálogo demora más”. “Estamos demostrando que no somos ni tenemos las ‘manos de yeso’, como nos decían antes. Ahora queremos acuerdos previos”, añadió. Pereyra reconoció que “la única ley importante” aprobada en los primeros cien días de gobierno fue la referida a la emergencia carcelaria. Precisamente esta ley provenía del trabajo de la comisión respectiva con el acuerdo pleno de los legisladores de la izquierda y de la oposición. Sin embargo cuando el proyecto ingresó en la sesión del plenario de la Cámara baja se originó un largo debate entre unos y otros que hasta hizo dudar de que antes hubiera existido un acuerdo sobre su contenido.
“Si la oposición piensa que los acuerdos se tienen que dar únicamente para obtener cargos en los organismos públicos, estamos fritos. Es verdad que hay menos iniciativas del Poder Ejecutivo pero este gobierno optó por un camino de diálogo con la oposición. Si ellos no lo quieren así que lo digan pero es importante que sepan que el Parlamento no puede ser como una fábrica de hacer chorizos”, señaló el legislador.
Sube la presión
No es que a los senadores les suba la presión por causa del frío. La presión es sindical. Es que dos sindicatos cuestionaron las postulaciones de un colorado en UTE y de un frenteamplista en el Consejo de UTU, ejerciendo presión sobre el Senado, que vota la próxima semana las primeras venias para la incorporación de la oposición en las direcciones de organismos públicos.
Informa “El País” que el sindicato de UTE considera “inconveniente” que José Garchitorena, integrante del sector colorado Vamos Uruguay, sea designado en el directorio de esa empresa pública, debido a una denuncia de supuesto “acoso moral” elevada por el sindicato de Ancap --organismo donde se desempeña como gerente-- al Ministerio de Trabajo. Ante la denuncia, el MTSS “aconsejó” a Ancap iniciar una investigación administrativa. Pero el presidente de AUTE, Daniel Figueroa, dijo que no tienen pruebas contra Garchitorena. Mientras que el sindicato de UTU emitió una nota en la que “rechaza el posible nombramiento de Wilson Netto al Consejo Directivo de UTU”. Afutu aduce “discrepancias” con “las políticas educativas y de gestión llevadas adelante por ese cuerpo”, presidido por Netto --integrante del MPP-- en el último período.
“Que no panda el cúnico”
Así decía el Chapulín Colorado, recordado personaje creado por Roberto Gómez Bolaños. Algo así dijo el presidente José Mujica al llamar a no “asustarse” si se piden acuerdos con “cláusula fusible”. Según informó “Últimas Noticias”, en su audición por la emisora M24, Mujica llamó a tener “madurez” y “negociar con altura” en la discusión salarial que se avecina. “No debería sorprendernos que en tiempos donde se empiezan a discutir convenios colectivos y donde se empieza a preparar el Presupuesto de la nación, los sindicatos, los trabajadores, realicen sus reclamos tratando de mejorar la condición de sus afiliados”, dijo.
Aseguró que es un “hecho natural” porque se vive en una sociedad donde el “deseo de ganar más” constituye el “motor principal que la mueve y la empuja”. Agregó que nadie “se complica la vida para estar igual o para estar peor”. No obstante, dijo que es un asunto que tiene riegos porque los factores que se pueden medir y observar no son siempre todos lo que una sociedad representa. Pidió no “escandalizarse” con los reclamos que luchan por generar más riqueza, pero resaltó que el asunto es saber “cuáles son los límites de ese reparto” para que la voluntad de invertir no se detenga. Y mencionó como uno de los límites, la flexibilidad que deben tener todos los acuerdos.


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