Deportes | 01 Jul El técnico de la selección brasileña, Dunga, procura con el tiempo en contra armar un rompecabezas por las dudas derivadas de lesiones para poder llegar con su máxima fuerza al choque de mañana ante Holanda, por los cuartos de final de Sudáfrica 2010.
Otra vez Dunga tiene jugadores que son prácticamente bajas en este duelo a disputarse en Port Elizabeth, aunque esta vez en un choque más difícil y con menos opciones para suplirles.
La instancia también será una prueba para el discurso del entrenador y sus dirigidos de que la 'Seleçao' no tiene divisiones entre titulares y reservas y que prevalece el colectivo sobre las individualidades, si bien ha mantenido la misma base.
"No importa quien sale o entra, el rendimiento del equipo es el mismo", asegura el punta Robinho, aunque en esta situación eso queda por verse.
A la baja segura del volante Elano, afectado por un edema óseo, se agregan las eventuales ausencias de los volantes Felipe Melo y Julio Baptista, que no debieron salir sentidos en el empate 0-0 ante Portugal, al cierre del Grupo G, y tampoco estuvieron a la orden en el triunfo 3-0 sobre Chile, el lunes en Johannesburgo.
Melo, que está en recuperación de un fuerte golpe en su tobillo izquierdo, y el reserva Baptista, sentido en una rodilla, entrenaron el miércoles junto a los reservas de la 'Seleçao' en el colegio Saint Stithians en Sandton (Norte de Johannesburgo), aunque su presencia no es cierta ante la Naranja Mecánica.
Baptista y Melo realizaron ejercicios físicos y algunas tareas del balón y si bien exhibieron mejoría, no es seguro que puedan estar disponibles.
Sin embargo, para reemplazar a Melo tiene problemas pues el volante Ramires recibió contra los andinos su segunda amonestación con lo cual sus opciones pasarían a ser el diminuto Josué o Kleberson, que jugó el lunes sus primeros minutos con el duelo ya 3-0.
Con la ausencia de Elano, Dunga tendría que apelar al polifuncional Dani Alves, que fue titular ante Chile y es considerado el 12º titular. El cotejo se presenta como de alta exigencia para el equipo pentacampeón, frente a otro invicto.