Rurales | 01 Jul Las industrias frigoríficas volvieron a trasladar el aumento en el precio del ganado gordo a la carne que le venden a los carniceros para el abasto, por lo que se generalizó este miércoles la suba en todo el país. El nuevo ajuste es en las carnicerías del Sur y Este del país de tres pesos por kilo para todos los cortes con hueso, incluida la media res, mientras que en Paysandú oscila entre entre cinco y siete pesos por kilo. Es el segundo que se produce en los últimos 15 días (el anterior había sido por un valor similar para Montevideo, en tanto en nuestra ciudad solo se había registrado un aumento en los asados). La suba fue generalizada abarcando a toda la industria exportadora que también vuelca parte de la producción en el mercado interno. La oferta de ganado gordo, especialmente de novillos, continúa escaseando, caen las faenas semana a semana y los precios suben. El ajuste de la pasada semana pasó inadvertido en el consumo y los comerciantes capitalinos estiman que tampoco se verá afectado por este ajuste. “La carne lleva dos años con un precio estable y está a valores muy competitivos. Eso hace que el consumo también se mantenga estable”. La suba de la semana pasada también había afectado a todos los cortes con hueso, incluidos los asados, corte que está siendo destinado por muchos frigoríficos a Rio Grande do Sul (Brasil), sin desabastecer la demanda del mercado interno. Por otro lado, si bien cayeron los negocios de exportación con la Unión Europea, hay una fuerte exportación de cortes del delantero a países de la Federación Rusa.