Rurales | 07 Jul Pasó la mitad del año y sigue sin aparecer la oferta de ganado gordo, por lo que los precios continúan firmes e incluso se reportan negocios de novillos por encima de los U$S 3,10, la vaquillona tiende a ubicarse a U$S 3 y la vaca a U$S 2,90.
La fuerte baja en la faena de vacunos no hace más que poner números a la fuerte caída en la oferta que --como dato importante--, no ha aparecido con el comienzo del segundo semestre.
Algunos operadores reportan dispersión de valores y actitudes. Algunas industrias observan la suba de precios con más cautela, mientras que otras permanecen activas.
La Asociación de Consignatarios de Ganado (ACG) en su última reunión de precios del pasado lunes, ubicó al novillo en U$S 3 y en U$S 1,57 en pie. La vaca gorda quedó en U$S 2,78 y U$S 1,35 en pie. En ambos casos con subas muy fuertes, de diez centavos por kilo en pie en una sola semana y entre 16 y 18 centavos de suba en segunda balanza. Incluso la vaquillona quedó muy cerca de los U$S 3, cotizando a U$S 2,97.
La escasez de oferta se ha revelado como un factor más estructural del que podía suponerse, dice el informe de Conexión Agropecuaria.
Lo pronunciado de las subas también está generando una actitud cautelosa de los productores que cuentan con una situación favorable en cuanto al estado de los animales y los forrajes. Por ahora logran sostener ganancias de peso interesantes o el mantenimiento que, en virtud de la valorización de la hacienda, lleva a una acentuación de una oferta de por sí ya escasa.
Ovinos
También en los ovinos se mantiene una tendencia ascendente de precios, aunque en este caso la faena aumentó respecto a lo exiguo de las semanas anteriores.
Pero los precios siguen en su trayectoria de impresionante ascenso. Mientras los corderos pesados llegan a U$S 4,13 en la referencia de la Asociación de Consignatarios de Ganado, los corderos livianos y los borregos también superan la referencia de los US$4.
índice
Los índices de INAC también reflejan la suba de los precios pero con el natural rezago del indicador realizado sobre la base del promedio pago por las haciendas que entran a los frigoríficos. En pie, para la semana terminada el 26 de junio, la referencia oficial subió dos centavos, de U$S 1,45 a U$S 1,47.
En cuarta balanza (ex segunda), las cotizaciones promedio pasaron a U$S 2,80 frente a U$S 2,75 de la semana terminada el 19 de junio.
Los rendimientos se mantienen estabilizados en un entorno de 52,5%. Pasaron a 52,41% desde 52,71% de la semana previa.
Perspectiva
Durante esta semana todo parece indicar que lo principal a mirar será la magnitud de un nuevo escalón de una postzafra que se revela muy interesante a la luz de los inconvenientes que muestran los mercados financieros.
Lo escaso de la oferta se mantiene a pesar de que ya ha dejado de ser válido el argumento de la retención vinculada al factor impositivo de mitad de año. En esta será interesante observar si la llegada de los fríos intensos genera algo más de oferta, algo que parece improbable mientras los precios sigan ajustando tan fuerte al alza.
¿Dónde está el techo? La pregunta es tan válida para los precios de los vacunos como para el de los ovinos.