Locales | 21 Ago El diputado sanducero Walter Verri (Vamos Uruguay), ratificó su posición contraria a la posible liberación de reclusos como estrategia para descomprimir el sistema carcelario, así como al proyecto gubernamental de habilitar a los jueces penales a liberar reclusos para crear cupos a nuevos procesados. El legislador colorado señaló la necesidad de “ser claros y firmes” ante iniciativas de esta naturaleza, ya que a su entender repercutirán negativamente e incrementarán los índices de delincuencia.
Verri opinó que una ley de liberación de reclusos generará mayores índices de inseguridad y recordó que la ley de Humanización Carcelaria, aplicada durante la gestión de José Díaz al frente del Ministerio del Interior, no logró su cometido, ya que muchos de los 800 reclusos liberados (un 30%) volvieron a cometer delitos. “Esa experiencia fue muy mala y el propio comisionado parlamentario Álvaro Garcé lo dijo en su momento. No creemos que nuevamente haya que tirarle la responsabilidad a la gente para quitar presión a las cárceles”, afirmó el legislador, quien admite que las cárceles uruguayas no son un lugar adecuado para contener a este sector de la población, más allá de su vinculación al delito. Recordó que el gobierno siempre contó con el respaldo parlamentario para mejorar las condiciones de reclusión y refaccionar las cárceles, así como para ampliar el personal carcelario y trasladar reclusos a unidades militares, en tanto mencionó el desgraciado episodio que costó la vida a doce internos en la Cárcel de Rocha. “El Partido Colorado tuvo la actitud responsable y en ningún momento dijimos que fuese responsabilidad directa del ministro, ni exigimos su renuncia. Sin embargo, dijimos que el ministro tenía que tomar las medidas para que esas cosas no ocurrieran. Hemos tenido una actitud seria respecto al tema de la superpoblación carcelaria”, sostuvo. No obstante, rechazó enfáticamente la liberación de reclusos como herramienta para solucionar el problema, porque de esta forma se trasladará “la presión” a la ciudadanía, obligándola a vivir encerrada, “con más rejas, con más cerraduras, con más candados”. Asimismo, recordó que en Uruguay se cometen 480 delitos por día y manifestó su sorpresa por el nuevo proyecto del gobierno, cuyo articulado prevé que los jueces penales, al efectuar un procesamiento con prisión, “deberán tener en cuenta los cupos carcelarios existentes” y, en caso de no existir plazas suficientes en el sistema carcelario, deberán “analizar la lista de otros reclusos que eventualmente pueden ser beneficiarios de detención domiciliaria, libertad condicional, o medidas alternativas a la detención, como mecanismo de descongestionamiento carcelario”. Verri aseguró que, de aplicarse, una norma de esta naturaleza traerá “mayores problemas”.