TABARÉ AGUERRE

Rurales | 28 Ago La problemática de la concentración de la tierra “es un tema de difícil abordaje ya que, por un lado, es un factor dinamizador de los sistemas productivos pero, por otro, tiene consecuencias negativas para aquellos sectores que por razones de capacidad o escala no logra acompañar el proceso”, señaló el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), Tabaré Aguerre. El secretario de Estado disertó en el almuerzo de la Asociación de Dirigentes de Marketing (ADM) celebrado en el Complejo Riviera, centrando su exposición en los avances de la agropecuaria en los últimos 20 años.
En la ronda de preguntas que se le efectuaron al orador, el tema de políticas referidas a la propiedad de la tierra tuvo particular destaque. Ante una pregunta sobre eventuales medidas de protección de los pequeños productores por la compra de tierras por parte de multinacionales, Aguerre dijo que el Instituto Nacional de Colonización (INC) “actuó fuertemente en el anterior período de gobierno después de muchos años de no tener acción y se pretende que en esta administración siga teniendo ese papel”. Sin embargo, admitió que con eso solo no se resuelve el problema y agregó que se está pensando en otros instrumentos. Sostuvo que debe haber en el mercado interés en posicionarse en tierra y, si es cierto que el aumento del precio es más acelerado que el incremento de lo que se produce en ella, es probable que como bien inmobiliario sea una opción interesante. “Deberíamos explorar alternativas que permitieran captar el ahorro interno, ya sea privado o institucional, con mecanismos predecibles, generando instrumentos que le permitan a quienes trabajan la tierra, no acceder a la propiedad --que no es lo determinante-- y sí a la estabilidad en el uso de la misma”, dijo el ministro.
Agregó que para un productor lechero es determinante saber que contará con su predio por diez años. “Es una preocupación de esta administración generar oportunidades para aquellos que tienen la posibilidad, la voluntad, la decisión y la constancia de vivir y trabajar en el campo”, agregando que esto es muy difícil de lograr con decretos. A su juicio, hay que encontrar “una lógica económica” que permita cerrar un círculo virtuoso entre el refugio de capital que significa la tierra para un terrateniente y el productor que se instala en ese predio. Recordó la reciente medida adoptada por Brasil de impedir la extranjerización de la tierra y ante los medios de comunicación, precisó que “lo difícil de esto es cómo corregir un defecto sin generar un defecto mayor”, a la vez que indicó que este fenómeno “generó un crecimiento de la producción y una dinamización de los sistemas productivos”.
“Hay más agricultura, hay más exportación, hay más transporte, hay más logística, y hay que lograr que aquellos sectores productivos que no tienen la capacidad o la escala para acompañar este proceso no desaparezcan”, añadió el ministro y consideró que se debe ir hacia una política de amortiguar las externalidades negativas que estos procesos tienen, aunque admitió que es un punto que aún no está definido.