Jornada en Paysandú

Locales | 30 Ago Se cumplió una conferencia para personal de salud sobre el tema “Registro Uruguayo de Trasplantes” que coordinan los cuatro equipos médicos de trasplantes renales que existen en el país en los hospitales de Clínicas, Italiano, Evangélico y Americano, que atiende sobre todo a los niños con esta afección.
La actividad tuvo lugar en la sala de conferencias de Comepa.
Los doctores Francisco González, profesor de la Cátedra de Nefrología de la Facultad de Medicina y Marcelo Nin, profesor adjunto de la misma, que funciona en el Hospital de Clínicas, señalaron la evolución en cuanto a la calidad de vida de trasplantados y donantes.
Nin dijo que “en cuanto a las donaciones inter vivo se hacen los estudios exhaustivos para determinar que esa persona no tenga ninguna enfermedad general ni renal, la que va a quedar con un riñón, pero eso no le va a generar complicaciones específicas renales ni de deterioro de su calidad de vida. Una persona con un solo riñón vive en forma normal, el donante va a tener una evolución normal y vida similar a la de quien haya donado. Obviamente que la donación de un riñón no le va a afectar la sobre vida ni tampoco la función renal”.
Ante una pregunta sobre el desfasaje existente (si son más quienes esperan un riñón) respondió “tenemos una lista de receptores (enfermos renales) de entre quinientas y seiscientas personas. Hay que tener en cuenta que en el Uruguay se hacen unos 120 trasplantes por año, por lo que hay un desfasaje de personas en espera para un trasplante de riñón. Es obvio entonces que tenemos una menor cantidad de donantes en referencia a la necesidad de los receptores y por esto lo que se procura es optimizar la donación, tanto cadavérico como si es posible inter vivo en aquellas personas que -en el momento- tienen que estar sometidas a tratamiento de diálisis”.
Más información y sensibilidad
Por su parte el doctor González reiteró “tal como dijo mi colega hay una carencia de riñones, aunque la cantidad de órganos retirados cada año con destino a trasplante ha aumentado -insisto- gracias al conocimiento y sensibilidad de la población en general, que entiende el sentido de la donación. Años atrás esto no fue así pero ha ido cambiando gracias a varias medidas y en parte a la acción de los medios de difusión que dieron a conocer casos ocurridos, así como las garantías que existen en nuestro país para que no haya un uso indebido del sistema de donación. Pero, insisto, sigue habiendo una carencia de riñones para trasplante por lo que hay que buscar que se intensifique la donación. También se acepta cuando una persona sana decide -con gran nobleza de su parte- donar un riñón, debiéndose subrayar que la calidad de vida es exactamente la misma”.
Indicó que “las mujeres jóvenes también donan y tenemos varias en el Uruguay, pese a lo cual pueden tener hijos y una vida totalmente normal”.
Familiares
donantes inter vivos
González recordó que “en nuestro país por la ley vigente solo pueden ser donantes inter vivos los familiares del paciente, un aspecto que tiene el objetivo de proteger a las personas del comercio de órganos. De manera que solo los familiares del paciente, padres, hijos, etcétera, pueden ser donantes”.
También refirió al aspecto asistencial de los enfermos renales: “los institutos de Medicina Altamente Especializada (IMAE) fueron la herramienta que tuvo nuestro país para asegurar, ya hace muchos años, porque proviene de finales de la década de 1970 y principios de la siguiente, para asegurar tratamientos que son muy caros y que pudieron ser suministrados en el Uruguay. Esta cobertura fue y es independiente de la capacidad económica de la persona que la necesite o del instituto (una mutualista o un hospital) al que perteneciera.
Acá en Paysandú -recordó- tienen un instituto pionero (Centro de Diálisis de Comepa) que hace unos años fue renovado en cuanto a su planta física y que es uno de los mejores en su funcionamiento con gran capacidad técnica. Allí se dializan todas las personas con afecciones renales severas de Paysandú, todas ellas tienen un mismo lugar al que recurrir, aspecto sumamente importante desde el punto de vista de la democratizción. El IMAE es una herramienta que ha permitido a mucha gente en el Uruguay esta valiosa atención y que de alguna manera la creación del Fonasa -todavía en implementación- retoma la idea del Fondo Nacional de Recursos para expandirla en la sociedad uruguaya”.