Gastón Puerari

Deportes | 06 Sep Gastón Puerari, en base a un gran rendimiento, su velocidad y colaborando con un gol, fue la gran figura de Wanderers, que derrotó 2 a 0 a Tacuarembó por la 3ª fecha del Torneo Apertura del fútbol uruguayo. El delantero sanducero, que había anotado en el debut bohemio frente a Nacional, volvió a hacer de las suyas en el equipo de Daniel Carreño, que quiere pensar partido a partido.
“El equipo anduvo muy bien pese a que fue complicado, porque Tacuarembó, que tiene buen equipo, nos complicó. Además, la cancha estaba muy mojada, no se había podido cortar el pasto por el mal tiempo, y terminamos cansados”, dijo Puerari a EL TELEGRAFO poco después de ser considerado como la figura del partido.
El delantero, que llegó hace un año a Wanderers, dijo sentirse “cómodo y contento” integrando el plantel que orienta Carreño. “Es un equipo tranquilo, que tiene todo para trabajar y eso es importante. ¿Qué objetivo nos planteamos? Ir partido a partido. Creo que estamos bien, el equipo está motivado, pero no podemos anticiparnos todavía y pensar en lo que puede llegar a ser. Nosotros nos planteamos partidos cortos, primero rendir en cada partido, trabajar durante la semana y llegar al domingo sabiendo que de locales tenemos que ganar, y que de visitantes el control de la pelota, el toque y la movilidad tiene que ser nuestro fuerte”, dijo.
Puerari se ilusiona con su rendimiento. “Mi fuerte es la velocidad, tengo que apostar a eso porque no tengo altura”, aseguró entre risas, en tanto afirmó que “uno se ilusiona porque las cosas están saliendo bastante bien”. Igualmente, el goleador apuesta al rendimiento del equipo, porque “tenemos que ser protagonistas como lo intentamos ante Nacional y Tacuarembó, sabiendo que no tenemos que pensar más allá de cada fin de semana, para no perder el objetivo”.
Puerari llegó a Wanderers desde el Emelec ecuatoriano, luego de haber llegado en 2008 al profesionalismo de la mano de Rampla. “Estaba en la selección de Paysandú, hice un par de partidos buenos y surgió la posibilidad de ir a Rampla. Después tuve un corto pasaje por el Emelec, que me sirvió mucho como experiencia. Sucedió que Aníbal Ruiz me había pedido, y a los días de llegar a Ecuador lo cesaron”, comentó mientras del otro lado de la línea su hijo Fantino “patea todo lo que encuentra”. Así llegó la chance de Wanderers, equipo en el que tiene como sueño “hacer un buen campeonato y ojalá que me siga tocando hacer goles. Mi contrato vence en diciembre, y después se verá. Por ahora solo quiero andar bien y sumar triunfos”.