Locales | 07 Sep En la sede de Ajupe volvió a reunirse la Intersectorial de Pasivos, grupo que originalmente se había autoconvocado por el exclusivo tema de la vivienda, abriendo ahora una agenda que comprende también la inseguridad y mejora de las pasividades sumergidas. Estuvieron presentes el diputado del Partido Colorado Walter Verri, diputada suplente del Frente Amplio Cecilia Bottino y Marisa Iturralde en representación del diputado nacionalista Miguel Otegui, la gerenta del Banco de Previsión Social Paysandú Marilyn González, presidente de la Asociación Sanducera de Jubilados y Pensionistas de Paysandú, Gerardo Irazoqui, “Pasividades” de EL TELEGRAFO y dirigentes de Ajupe.
La presidenta Alicia Leites de Caraccio realizó un planteo inicial sobre las premisas que se plantea la Intersectorial en esta nueva etapa en una forma “de llamado de atención a las autoridades, sin banderías políticas”. Enumeró los temas prioritarios para señalar en referencia al 17 por ciento de aumento de la jubilación mínima (a partir del 1º de octubre próximo) como una “verdadera cachetada. No hay justicia con la gente mayor de más escasos recursos y que hoy está cobrando esos $3.097 mensuales, habiendo un pasivo presente que -precisamente- percibe esa cantidad y que corrobora lo dicho. Creo que no existe monto demasiado elevado para solucionar el problema de la pobreza de los jubilados”, sostuvo la presidenta de Ajupe.
La gerenta del BPS refirió a la situación de la vivienda, recordando que se construyen 40 unidades en la zona de Río Negro y Felipe Argentó, así como existe una situación controlada en el barrio Paysandú Sur (prolongación de Cerrito y Benito Chain), se han alquilado viviendas a jubilados en la ciudad de Paysandú y existe el llamado “cupo-cama” por el cual el BPS otorga $9.000 en aquellos casos de personas que no son auto válidas y que deben ser alojadas junto a otros ancianos.
Preocupación
compartida
El último aspecto señalado generó un dialogado especial de los participantes en la reunión, quienes coincidieron en cuanto a la preocupación por el estado de varias “casas de salud” existentes en Paysandú, donde los adultos mayores que allí se encuentran están hacinados, tienen mala alimentación y ambiente sucio.
Cecilia Bottino recordó que “se ha trabajado por la Dirección General de Salud en este tema e incluso hubo un local clausurado en nuestra ciudad”. Se resolvió convocar a una próxima reunión a aquellas instituciones que tienen directa responsabilidad en el tema, incluyendo el MSP, Intendencia de Paysandú, Junta Departamental a través de la Comisión de Promoción Social, para que -como dijo la gerenta del BPS- “los públicos y privados nos sentemos a conversar sobre ésto en que se deben tomar decisiones”.
El diputado Verri, entre otros conceptos, afirmó estar “dispuesto a trabajar en todos los temas, pero quiero dejar en claro que en las prestaciones jubilatorias los legisladores no podemos intervenir, ya que ello es prerrogativa del Poder Ejecutivo. Hay muchas cosas por hacer, pero yo no voy a cometer el error demagógico de asegurar lo contrario porque el gobierno actual no sea de mi partido”. Pese a los reclamos ya citados sobre los jubilados en extrema pobreza y la falta de un aumento de monto fijo como se dio a comienzos de la década del 2000, hubo coincidencia de que existen mejoras a nivel general en especial de funcionamiento del BPS, apertura de información y gestiones pre jubilatorias. Es importante destacar que hubo activa intervención de los jubilados presentes y se estableció un diálogo constructivo que se torna en un preámbulo ideal para nuevas instancias promovidas por la Intersectorial de Pasivos de Paysandú.