Deportes | 11 Sep Sin la presencia de Peñarol y Nacional, que postergaron sus respectivos partidos, hoy se pone en marcha la cuarta fecha del Torneo Apertura del fútbol uruguayo de Primera División, con dos compromisos.
A las 15, Racing recibirá en el Parque Roberto a River Plate, con el arbitraje de Yimmy Alvarez, Pablo Fandiño y Robert Muniz, mientras que el partido televisado, a jugarse desde las 15.30, será protagonizado por Rampla y Cerro.
El clásico de la Villa se jugará en el Estadio Olímpico, a orillas del Río de la Plata, y será dirigido por Martín Vázquez, Miguel Nievas y Carlos Pastorino.
Los dos grandes solicitaron postergar su presencia este fin de semana. Peñarol, que debía enfrentar a El Tanque Sisley, jugará este partido el miércoles 29 dado que se prepara pensando en la revancha ante el Barcelona de Guayaquil por la Sudamericana.
Nacional, por su parte, pidió postergar el choque ante Bella Vista a pedido de los propios futbolistas tricolores, que plantearon la posibilidad a los dirigentes dado que el ánimo no es el mejor tras el accidente de tránsito sufrido por Diego Rodríguez, uno de los integrantes del plantel.
Más partidos
Mañana se desarrollarán otros cuatro partidos, que complementarán parcialmente la etapa: Defensor – Wanderers, Tacuarembó – Liverpool, Central Español – Miramar Misiones y Danubio – Fénix.
Vale recordar que, por el momento, la tabla de posiciones está de la siguiente manera: Danubio 7, El Tanque Sisley 7, Bella Vista 6, Liverpool 6, Fénix 5, Defensor Sporting 4, Central Español 4, River Plate 4, Wanderers 4, Peñarol 4, Miramar Misiones 3, Cerro 2, Nacional 2, Tacuarembó 1, Racing 0, Rampla Juniors 0.
Poco optimistas
Los médicos que atienden al futbolista de Nacional Diego Rodríguez, que sufriera el jueves un grave accidente automovilístico, no son optimistas en cuanto a la posibilidad de recuperación del deportista. El jugador fue reanimado en el lugar del accidente y, tras constatarse las graves heridas recibidas, fue operado de urgencia en la tarde para aliviar la presión intercraneana. “El pronóstico no es bueno; no somos optimistas”, señalaron los médicos.