Locales | 19 Sep Varios sanduceros concluyeron recientemente el curso de formación de Guías de Turismo de Naturaleza, organizado por el Programa de Conservación de la Biodiversidad y Desarrollo Sustentable en los Humedales del Este (Probides) en el marco de un acuerdo con el Ministerio de Turismo y el programa de Mejora de la Competitividad de los Destinos Turísticos Estratégicos del BID. Uno de los egresados, Mauricio Guillermoni, informó que esta capacitación se llevó a cabo con el financiamiento del referido programa del BID, el proyecto de fortalecimiento del Sistema Nacional de Áreas Protegidas y el Programa de Pequeñas Donaciones. Los representantes de nuestro departamento que completaron la capacitación fueron, además de Guillermoni, Fernando Varietti, Juan Laborde, Fernando Doyenart y Yanet Guillermoni, quienes recibieron sus diplomas en la sede del Ministerio de Turismo de la mano de la subsecretaria de esta cartera, Liliam Kechichián, y de la ministra de Vivienda, Graciela Muslera.
Según Guillermoni, los egresados se manifestaron conformes con la organización, la calidez humana del grupo y “el nivel académico de los disertantes de los diferentes módulos”, en tanto destacó “el esfuerzo demostrado en la organización y difusión realizado por las coordinadoras del programa Probides, Diana Musitelli y Mariana Vilaró”.
“La profesión de guía de naturaleza requiere una serie de conocimientos, técnicas y actividades orientadas a facilitar la interpretación de un espacio natural. En esta línea, se pretendió brindar herramientas que le permitieran al guía ofrecer un servicio turístico de calidad y contribuir a divulgar los valores naturales, históricos y culturales, que conforman el patrimonio natural. También se buscó fomentar la participación de las comunidades locales en la gestión turística y en los esfuerzos de conservación”, añadió Guillermoni, quien además es docente de Historia. Asimismo, exhortó a “asumir una política eco turística sustentable” y a “prever la calidad ambiental y, como consecuencia, la calidad de vida”.
Los cursos fueron dictados a pobladores de todo el país, en forma semi-presencial. Se abordaron temas de biodiversidad, turismo, patrimonio cultural, fauna y flora. En Río Negro y Tacuarembó se desarrollaron talleres que incluyeron, como evaluación práctica, un trabajo de campo en distintas áreas protegidas. En todas las localidades se contó con el apoyo y la colaboración de las intendencias municipales.