Nacionales | 20 Sep Once policías son investigados --cinco están detenidos e incomunicados-- por la muerte de un joven mecánico de 24 años, ultimado de cuatro disparos en medio de una persecución en las primeras horas del domingo en la ciudad de Piriápolis. Los policías fundamentaron su acción en que el joven estaba armado, lo que es desmentido por familiares y amigos, quienes intentaron tomar la seccional policial en medio de un profundo malestar. El juez penal Gabriel Ohanian resolvió mantener detenidos e incomunicados a los cinco policías implicados en un incidente en Piriápolis que terminó con la muerte de Michel Sebastián Mariño Olivera, de 24 años, en las primeras horas de ayer. Otros seis uniformados comparecerán hoy ante el juez, pues estaban prestando funciones en la seccional del balneario fernandino durante los hechos. Mariño Olivera recibió tres disparos en la espalda y uno en la cabeza, falleciendo en el acto. Según amigos que acompañaban al joven, un grupo de personas estaba “quemando cubiertas” cuando surgió una “picada” con otro vehículo de la que Mariño participó con su camioneta. En ese momento un móvil policial comenzó a perseguir la camioneta que circulaba a alta velocidad. Sebastián Hernández indicó que se comunicó con Mariño a su celular y éste le comentó que en medio de la persecución había logrado parar su camioneta en la intersección de Ellauri y Misiones y ocultarse de los policías, pero luego cortó la comunicación porque los policías llegaban. Los familiares aseguran que el joven fue ultimado dentro de su vehículo. El parte policial informa que el hecho ocurrió alrededor de las 00:00 del domingo cuando una patrulla policial interceptó a la camioneta Volkswagen Saveiro, matrícula 208.043, por desplazarse a alta velocidad por la rambla República Argentina. “Uno de los efectivos, al descender del móvil policial para identificar al conductor, manifiesta sentirse rozado por el rodado de mención; en dicha instancia se suma a la persecución otro móvil policial. En el transcurso uno de los policías efectúa disparos contra la parte trasera de la camioneta impactando en la cabina donde el conductor recibe cuatro disparos que le provocan el fallecimiento al joven Michel Sebastián Mariño Olivera”, agrega la información oficial.
Según la versión de los efectivos recogida por “Observa”, un móvil intentó detenerlo pero el joven desacató la orden, de-satándose entonces una persecución que recién acabó cuando otro patrullero logró interceptar la camioneta en las inmediaciones del camping de AEBU. Pero el fugitivo había tratado de embestir a uno de los efectivos y entonces se produjeron los disparos. La madre de la víctima, Rosario Olivera, señaló que la policía informó sobre las 4 de la mañana a la familia que el joven había sufrido un accidente. Familiares y amigos recorrieron la zona pero no encontraron evidencias del accidente. Señaló que recién a las 7 la familia fue informada que el joven había fallecido a raíz de cuatro balazos. Añadió que en la camioneta se aprecian claramente los impactos de bala. En medio de un profundo malestar, familiares y amigos intentaron tomar la seccional policial, pero la situación no tuvo mayores consecuencias. Los familiares y amigos de la víctima no salieron de su asombro cuando a media mañana fueron informados por un medio local que la policía había encontrado un arma en el interior de la camioneta. Olivera negó que el joven tuviera un arma pues jamás había utilizado una. El juez aguardaba el resultado de la autopsia para despejar algunas dudas. También ordenó a Policía Técnica la realización de pericias balísticas a las armas usadas por los efectivos que participaron en los confusos incidentes. Por su parte, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, dijo a Canal 12 que según la investigación de la Jefatura de Policía de Maldonado, los policías son responsables de esta muerte. Las autoridades brindarán hoy una conferencia de prensa para brindar detalles del hecho.