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Paysandú, Sábado 25 de Septiembre de 2010

Expo Prado

Presidente de la ARU discrepó con política tributaria y advirtió sobre situación del dólar

Rurales | 19 Sep El presidente de la Asociación Rural del Uruguay (ARU), Manuel Lussich, se quejó en su discurso de cierre de la Expo Prado 2010, de los cambios propuestos al sistema tributario, de la carga impositiva que sufre el sector agropecuario, y de los efectos que tiene en esa rama de actividad la ley de tercerizaciones. El gremialista se mostró poco optimista sobre el precio del dólar y se refirió a las primeras dudas que le genera el gobierno de José Mujica. El titular de la gremial anfitriona inició su discurso con un considerable retraso, ya que habitualmente el acto de clausura comienza puntualmente a las 14 o poco después, pero en esta ocasión el presidente de la República llegó 53 minutos después de lo esperado y generó la demora. En un discurso de 21 minutos el titular de ARU señaló aspectos fundamentales del crecimiento del país, enfatizando en el pleno acceso a los precios internacionales de los productos que tienen los exportadores uruguayos. Lussich dijo que “la libertad de exportar productos primarios permite que ese precio internacional le llegue al productor de la mejor manera, ya que es la garantía de que en un país chico exista competencia en todos los rubros, sean granos, ganado en pie, lana sucia. Como esperanzas, citó el nombramiento de un ministro que “conoce el sector y que nos ha dado el espacio necesario para dialogar”. También citó “la reforma del Estado”, la cual “esperamos se concrete y nos ponga por fin en el camino del país moderno que queremos”. Pero también se refirió a algunas dudas, mencionando la seguridad jurídica y estabilidad del sistema de reglas. Dijo no estar de acuerdo “con la divulgación de deudas que no se aclara en qué condiciones se contrataron, si están vencidas o no, y a cualquier ciudadano. Y menos aún que la autoridad tributaria adquiera nuevas facultades para acceder a informaciones de secreto bancario”. Agregó que este avance “parece parte de un proceso que, paso a paso y de modo casi imperceptible, se ha ido instalando en la sociedad, depositando en la Administración cada vez más información privada. El avance sobre infinidad de manifestaciones reservadas supone una amenaza para la libertad y puede afectar el buen clima de negocios que tenemos actualmente”. Al referirse a la modificación de tributos, se preguntó por qué no se aprovecha “para atender un reclamo de justicia de tanto tiempo”. Estos reclamos fueron: ¿Hasta cuándo va a ser la pecuaria la que carga con el impuesto municipal? ¿Hasta cuándo seguirá esta iniquidad? ¿Hasta cuándo se gravará la lana con la tasa máxima del IMEBA? ¿Hasta cuándo va a seguir la discrecionalidad oficial para manejar, como se lo hizo, la contribución inmobiliaria aumentada por fuera de toda lógica económica?
DESBORDES
Lussich advirtió con preocupación situaciones de desborde sindical que ponen en peligro la estabilidad de las empresas. “No podemos hablar a favor de la lechería un día sí y otro también, y no señalar nada en un conflicto totalmente injusto para con la principal empresa láctea del país”, dijo en alusión a Conaprole. “El crecimiento de las exportaciones, de la productividad en cualquier rubro, no está separado de la política laboral y de la problemática sindical”, sostuvo.
TERCERIZACIONES
El titular de la ARU indicó que “no parece lógico que el productor rural se haga cargo de deudas de sus proveedores de servicios, que cada vez son más necesarios”. A la empresa de esquila o de alambrar, se suman ahora las que aplican herbicida, siembran o realizan reservas, así como otras tareas que van generando empresarios de servicios que conforman un nuevo entramado social. “Ponerle ‛palos en la rueda’ a este proceso es caro e ineficiente y dificulta el desarrollo de empresas que vienen apareciendo en todo el país, convirtiéndose en oportunidades de trabajo en el Interior, con frecuencia para pequeños productores rurales”.
MÁS DUDAS
Dijo no entender por qué se insiste en discriminar al sector agropecuario, prohibiendo las Sociedades Anónimas al portador, y sostuvo que aún se espera por la modificación de la ya tristemente famosa ley de Repoblamiento de la Campaña, que apenas aprobada ya surgieron varios proyectos para modificarla, intentando salvar los graves errores que contiene. También mencionó el creciente problema en el que se esta convirtiendo el abigeato, “en especial para los lanares”, donde “urge introducir cambios en la llamada Ley de Seguridad Rural a los efectos de darle a la policía y a la Justicia mejores instrumentos para su combate”.
TIPO DE CAMBIO
El presidente de ARU apreció el esfuerzo por mejorar el tipo de cambio, pero entiende que “todavía falta. El análisis primario de la Ley de Presupuesto no nos permite ser optimistas con la evolución futura del dólar”. Aclaró saber que “hay un componente externo que le genera debilidad, aquí como en cualquier parte del mundo. Pero hay un componente interno que deriva del movimiento de la inflación, alentada por el gasto público que genera inflación en dólares y pérdida de competitividad”. Dijo ver con preocupación que antes de la discusión del Presupuesto se vuelva a hablar de un “espacio fiscal” que significa aumento del gasto. Más allá de indicar no compartir esta política de gasto público, aseguró que “no se puede gastar como si la bonanza mundial nos fuera a seguir acompañando siempre”. Subrayó que en este contexto de caída del tipo de cambio real “no nos cansaremos de reclamar medidas que mejoren la competitividad”, ya que éstas “solo dependen del gobierno”. Refirió al régimen de devolución de impuestos, reducido en uno de los peores momentos de la competitividad. “Reclamamos que se devuelvan los impuestos indirectos que se generan a lo largo de las cadenas productivas”, dijo y exhortó a incluir en este concepto de pérdida de competitividad a las tarifas públicas, que son de las más caras en la región.
POLITICA EXTERIOR
Al referir a la política exterior, sostuvo que “nos parece bien que se esté preocupado por mejorar las relaciones comerciales y se procure abrir nuevos mercados”, pero también señaló “otro tipo de discusiones más hondas, fundamentales para el país en general, pero en particular para el sector. En un contexto internacional sin cierre a la vista para la Ronda de Doha, la vigencia del arancel externo común es un límite para la concreción de acuerdos de libre comercio que en el mundo se desarrollan sin cesar, al menos hasta que se pueda avanzar en el terreno multilateral”. Acotó que “aquellos países que transitan por el camino de los acuerdos bilaterales tienen mejores condiciones para la colocación de sus productos y en consecuencia compiten mejor que nosotros”.
EXPORTACIÓN
Para el titular de la ARU, el campo uruguayo “ha progresado gracias a la continuidad de una política de Estado”. En tal sentido, expresó que Uruguay posee “una cadena cárnica en competencia, abierta, totalmente desregulada, sin intervenciones del Estado ni para armar stocks reguladores, ni para prohibir exportar en pie, ni para determinar quién vende o a qué destinos”. Sostuvo que el riesgo de la desregulación “fue asumido con madurez y, más allá de discusiones que siempre habrá, las mismas se dan entre privados con el mercado abierto a todas las posibilidades”. Aplaudió las declaraciones del presidente de la República que “laudaron en el sentido de mantener abierta la exportación de ganado en pie. Exportación ésta que no es un fin en sí misma”.
De todas maneras le llamó la atención que “estando instaladas en el país empresas importantes con acceso a prácticamente todos los mercados del mundo, el ganado lo disputen otros países. Deberíamos seguramente buscar la explicación por el lado de los costos de nuestra industria, reflejo del costo país”. Agregó que “si fuera éste el problema, no se puede pensar en corregirlo trasladando el costo al productor, esto sería volver al pasado y perder el progreso que se obtuvo gracias a la continuidad de las políticas de estado a las que hacíamos referencia”.
CONSERVACION DEL SUELO
Compartió la preocupación del ministro de Ganadería por la conservación del suelo, pero dejó en claro que “para dejarle una tierra productiva a nuestros hijos, no le damos la derecha al Estado ni a nadie. Éste sería un principio ajeno a nuestra conciencia jurídica y al derecho de propiedad”. “Cuidado con este tema”, dijo, “porque como muchos otros en los que se invoca el cuidado del medio ambiente que suena políticamente correcto, se corre el riesgo de avasallar derechos que son más importantes que los mismos objetivos de conservación”.
EDUCACION RURAL
Solicitó al Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca que “se involucre en materia de educación rural; que coordine con las universidades, con la UTU, dirigiendo hacia allí recursos de cooperación y articulando esfuerzos con otros Ministerios”. Al referirse a la escuela rural, precisó que “la mitad de las escuelas del país lo son, de ellas la tercera parte no tiene agua potable y el 20% no tiene luz. Esto nos dice claramente que no todos los uruguayos tienen las mismas oportunidades”.
RUTAS Y CAMINOS
Lussich refirió también a la preocupante situación de la infraestructura vial de nuestro país. “Esa situación se ha agravado y el estado de las rutas y caminos (no hablemos del ferrocarril) comienza a condicionar el normal desplazamiento del transporte de mercadería y su llegada a los lugares de destino”. Agregó que “es evidente que la inversión en aumento y diversificación de la producción por parte de los privados, ha ido muy por encima de la del Estado para facilitar su traslado”.


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