Según estudio de otolitos

Locales | 03 Oct El gran surubí que apareció moribundo en las inmediaciones del Club Remeros a fines de agosto y al cual se le extrajeron estructuras óseas del oído para verificar su edad, tenía 17 años, según las conclusiones a las que arribaron técnicos de la Comisión Administradora del Río Uruguay. Sobre las causas de su muerte, fuentes del organismo manifestaron que “coincidió con la gran mortandad de peces registrada durante esos días, por lo que suponemos que al igual que el resto murió por la baja de defensas y bacterias oportunistas que lo atacaron”.
Luego de la publicación en EL TELEGRAFO de fotos del gran surubí, especialistas en peces de la Comisión Administradora del Río Uruguay se trasladaron hasta la zona del Club Remeros para pesar el ejemplar y extraer muestras para analizar.
El pez, de 148 centímetros de longitud total, pesó 28,300 kilos y le fueron extraídos los otolitos, unas estructuras calcáreas que se forman en el oído a pocos días de haber nacido el pez y que sirven para determinar su edad.
Se trata de un núcleo alrededor del cual se depositan nuevas capas de sustancia calcárea a medida que el animal crece. Si se observa con lupa, se pueden ver series de bandas concéntricas translúcidas --zona que creció lento en invierno--u opacas --zona que creció rápido en verano-- que resultan ser distintas y cuyo número de capas translúcidas nos da la edad exacta del pez en años. Ahora, los técnicos informaron que la edad del mismo era de entre 16 y 17 años y que la información recabada será utilizada en el marco del Programa de conservación de faunta íctica del Río Uruguay.
El secretario técnico de la CARU, ingeniero Alejandro Arcelus agradeció la cooperación de Leonardo Cabillón, lector de EL TELEGRAFO que nos acercó las fotografías del enorme pez y la difusión realizada por este medio, que permitió que el organismo se enterara de la existencia de este ejemplar y pudiera estudiarlo.