“Actividad preparatoria”

Locales | 07 Oct Los integrantes del Comité binacional integrado por científicos de Uruguay y Argentina ingresaron ayer por primera vez a la fábrica de celulosa de la finlandesa UPM (ex Botnia), en el inicio de un acuerdo entre los dos países para realizar un monitoreo ambiental del río Uruguay. El grupo está integrado por el doctor Juan Carlos Colombo y el ingeniero Guillermo Esteban Lyons por Argentina, y por el ingeniero Eugenio Lorenzo y el doctor en Ciencias Químicas Alberto Nieto en representación de Uruguay. A las 11.50 de la víspera llegaron a la planta de Fray Bentos, donde los esperaban técnicos de la Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama), que tienen a su cargo la responsabilidad operativa de los controles que habitualmente se realizan. La visita se enmarca en un documento firmado el 30 de agosto entre Uruguay y Argentina y que implica la creación de un Comité Científico, subsidiario de la Comisión Administradora del Río Uruguay (CARU) e integrado por dos representantes de cada país. Eugenio Lorenzo, uno de los representantes uruguayos y ex presidente de la CARU, se excusó de hacer comentarios y dijo: “no estamos empezando nada. Estamos haciendo una actividad preparatoria”.
Al igual que a los otros tres integrantes del Comité, le fue tomada una fotografía para la confección de un carné con el que podrán entrar y salir de la fábrica.
Las tareas de monitoreo se realizarán en total hermetismo, según lo adelantado por una fuente de CARU, que informó además que el único que realizará comentarios públicos sobre el tema será el canciller Luis Almagro. En tanto, Botnia informó que a solicitud del organismo binacional no realizará comunicados de prensa sobre el tema.
CONTROLES PREVISTOS
A principios de agosto, los cancilleres Héctor Timerman y Luis Almagro establecieron que los peritos tendrían un plazo de 60 días corridos para realizar el monitoreo de la planta y de la desembocadura del río Gualeguaychú, y de 150 días para definir un plan de control y prevención de la contaminación en el tramo del río compartido entre Uruguay y Argentina. El inicio de su actividad consistió en la presentación del grupo, durante una instancia a la que se convocó a la prensa el 2 de setiembre, realizada en la sede de Paysandú de la CARU. El Comité tendrá a su cargo el monitoreo del río Uruguay y de todos los establecimientos industriales, agrícolas y centros urbanos que vuelcan sus efluentes al río Uruguay y sus áreas de influencia. En lo que respecta al monitoreo a la planta productora de celulosa, los controles serán realizados dentro y fuera de las instalaciones de Fray Bentos. El Comité deberá presentar a la CARU un plan de monitoreo inicial, el que deberá atender a la caracterización adecuada de “todas las potenciales fuentes de aportes de sustancias contaminantes al río Uruguay”. Además, se realizará en forma continua la evaluación de las condiciones ambientales existentes en el medio acuático en la zona de influencia de evacuación de efluentes líquidos y emisiones gaseosas que lleguen al río provenientes de la planta, a los efectos de identificar si existen alteraciones en los niveles de calidad del medio acuático del río establecidos por el organismo binacional. En la zona de la desembocadura del río Gualeguaychú se realizarán controles en el río Uruguay y en el propio río Gualeguaychú. En este último caso será a una distancia suficiente del río Uruguay, que permita caracterizar la calidad de su afluente desde territorio argentino. El Comité también tiene a su cargo el monitoreo de todos los establecimientos industriales, agrícolas y centro suburbanos que vuelcan sus efluentes al río Uruguay y área de influencia. La tarea comenzará por un sector del río donde existe una evacuación significativa sobre la margen argentina, a elección de la parte uruguaya, y se continuará alternativamente a elección de una y otra parte.
El Comité será consultado de manera previa a toda decisión a tomar por la CARU sobre toda actividad en materia de control y prevención de la contaminación en el marco de los planes de monitoreo futuros.
El organismo binacional provee la remuneración de los científicos, el personal necesario para la asistencia técnica del Comité, así como su soporte administrativo, un lugar de trabajo y equipamiento.