Nacionales | 12 Oct El ministro de Industria, Roberto Kreimerman, informó que se invertirá en la confección de un nuevo mapa aerogeofísico del territorio nacional, con el objetivo de conocer el lugar de origen de los principales yacimientos. Para permitir que se extraigan materiales que pertenecen al Estado, se pasará del canon minero al sistema de cobro ad valorem, y se efectuarán cambios respecto al hierro, níquel y zinc.
El ministro Roberto Kreimerman, el subsecretario Edgardo Ortuño y el director de Minería, Pier Rossi, concurrieron a la Comisión de Industria del Senado, con el objetivo de exponer sobre las futuras modificaciones que se realizarán al Código de Minería. Tras la reunión, el ministro dijo que se plantearon modificaciones en el marco del desarrollo del sector minero, apostando a la formación de una cadena de valor. El objetivo es que las actividades de extracción generen actividad industrial y distintos servicios.
El ajuste de las etapas de trabajo, tanto en prospección como de exploración concuerda con las nuevas modalidades que requiere la minería a nivel internacional. Kreimerman dijo que se trabajará con mayor base científica. En el marco del Presupuesto se incluyó la realización de un mapa aerogeofísico, con el objetivo de saber dónde están ubicados los principales materiales mineros en el territorio nacional.
El anterior Código Minero es de 1982. En los 132 artículos se introducirán cambios sustanciales en los minerales metálicos como hierro, níquel y zinc. El jerarca subrayó que esos minerales son los que tienen una fuerte demanda por el aumento de la construcción en India y China, así como por el agotamiento de los yacimientos en los países tradicionales en ese rubro. Aseguró que siempre existió una minería tradicional en Uruguay relacionada con canteras, balastro y dedicada a la construcción, así como a insumos industriales. En los últimos 10 años se registraron aumentos importantes en los precios de los minerales metálicos, como oro, hierro, zinc y níquel. “El país cuenta con algunos de esos metales, que anteriormente no era rentable extraer”, afirmó.
En la etapa de explotación el principal cambio se registrará en el canon minero, que implica cambiar lo que el Estado cobraría por permitir extraer un material que pertenece al mismo. Se pasará al sistema ad valorem, a través de la facturación de lo que vende o exporta. A esta situación, se agregará un porcentaje para las intendencias de los departamentos donde esté ubicada la mina. Se pretende que durante el ciclo minero la empresa encargada de la explotación presente toda la documentación al respecto. De esta forma se deberá asegurar el “cierre de la mina”, con el aporte correspondiente de inversiones en industria, transporte y en temas ambientales. Esa situación implica una garantía y se exige información de avances semestrales y anuales.
Otros términos del futuro articulado establecen que el uranio recibirá igual tratamiento que el resto de los minerales energéticos, a efectos de que sean reservas del Estado para futuras explotaciones, al igual que otros hidrocarburos. Con esta propuesta de cambios en el Código Minero, el exportador tendrá que reservar un porcentaje de minerales para la venta en el mercado local, con el objetivo de que genere oportunidades de inversiones para el futuro. Kreimerman manifestó que existe a nivel del Parlamento un acuerdo político, con el objetivo de aprobar las modificaciones antes de que finalice el año.