Locales | 30 Oct (Por Pablo Blanc). “Esto está notable”. La frase del presidente de la República José Mujica tras recorrer las instalaciones de la empresa Midgold, en las cercanías de Chapicuy, evidencia su admiración por el trabajo realizado por la mayor productora de arándanos del país.
El mandatario llegó 20 minutos antes de las 15 (hora pactada para su arribo). Era esperado por integrantes del directorio de la empresa, su gerente general el ingeniero agrónomo Horacio Ozer Ami y el intendente de Paysandú, Bertil Bentos. Minutos más tarde llegó el jerarca comunal de Salto.
Rápidamente Mujica recibió información de la producción de arándanos a nivel nacional, que se encuentra en su quinto año de exportación, con algo más de 9.000.000 de dólares el año pasado y estimándose en alrededor de 12.000.000 en 2010.
Este sector, cuyo 60% se produce al Norte del Río Negro, emplea a entre 400 y 500 personas permanentes y más de 5.000 en temporada.
Ozer Ami sostuvo que en plena zafra se producen en Uruguay 1.800.000 kilos de arándanos. Pero también se refirió a Chile, que produce en una sola semana 4.000.000 de kilos. Como desafíos, el ingeniero agrónomo sanducero planteó la situación de la logística. Actualmente los envíos a Estados Unidos se realizan vía Ezeiza, saliendo la producción por Salto y uniéndose con los envíos que efectúan dos empresas argentinas, de la provincia de Santa Fe, en el mismo rubro.
El planteo se debe a las complicaciones surgidas desde Montevideo, cuyo costo es superior al del aeropuerto argentino.
De todas maneras, aclaró que en los embarques marítimos la situación es distinta en el puerto capitalino, donde se opera con fluidez.
El profesional manifestó que no es fácil competir solo como empresa, por lo que se debe vender la fruta uruguaya como país y “se debe brindarle prioridad a esto”.
Posteriormente observó las plantaciones de la “blue berry” y apreció con admiración el intenso trabajo que desarrollaba el personal del packing, la mayoría pobladores de la localidad de Chapicuy.
Aventura
Mujica señaló que “los tipos que se meten en esto tienen un margen de aventura”, refiriéndose a los empresarios sanduceros y argentinos que invirtieron en este emprendimiento. “Se metieron en una salsa que no podían conocer mucho porque es un cultivo nuevo”. Acotó que “ser pioneros no es sencillo y hay muchos dolores de cabeza”.
Mencionó que “hace 6 o 7 años cuando me hablaban del arándano yo tenía una desconfianza bárbara y ahora le colocamos a Estados Unidos y si nos dicen que no, adiós con el arándano”.
“Yo los tengo que felicitar porque hay gente que se tira al agua, juega su aventura y va a ir recogiendo sus frutos”, enfatizó. Comparó a la producción de arándanos con la de vinos, respecto a la exportación e incluso citó que “en los próximos años los va a superar y es una cosa reciente, por eso hay que felicitarlos”. Agregó que “tienen muchos problemas de ajuste y han tenido que esforzarse mucho para utilizar una tecnología que no se conocía”.
Dijo que el arándano “es importante, porque si están exportando entre 10 y 12 millones de dólares, hay que suponer que por la tasa de crecimiento, en pocos años lleguen a 25 o 30 millones”. No dejó pasar por alto que “esto no sólo duplicará la mano de obra para la cosecha, sino otra cantidad de actividades complementarias”.
Población rural
La preocupación de la salud rural “es una causa un tanto olvidada en el país”, sostuvo el mandatario al ser consultado sobre este tema. “Tenemos que darnos cuenta que la población rural tiende a apetecer un conjunto de servicios contemporáneos, que la población aspira tener”.
Refiriéndose a un tema planteado en otras oportunidades, Mujica indicó que “no podemos concebir productores rurales que no tengan luz eléctrica ni la posibilidad de educar a sus hijos. Porque si no la gente se nos va; no podemos pretender que la gente viva como lo hicieron nuestros abuelos, porque el mundo cambió y tiene otras cosas”.
Enfatizó que la gente “no se va a quedar en el campo por decreto, se queda porque le conviene y si no, se va. Si querés que se quede, tratala un poco mejor”, acotó. “Dale ciertas cosas y preferencias que no ha tenido”.
Se consideró “un francotirador”: “hay que bombardear mucho con ideas, pero va a costar y como no se consiguen las cosas a prepo hay que ir logrando un convencimiento hasta que la nación entienda que es su propia conveniencia”.
Una hora cuarenta después de su llegada, el presidente de la República se retiró de Midgold comprendiendo la importante inversión realizada y convencido de que el arándano le está dando una mano a la región.