OPINIONES

Locales | 07 Nov Saludo al director de EL TELEGRAFO con sinceras muestras de simpatía en el año del centenario del Diario y le pido que publique estas humildes consideraciones que me merece la Muestra de Coleccionistas locales, realizada por Afisan en su sala de exposiciones como homenaje a vuestro aniversario y gratitud por el apoyo que ustedes le dan a muchos sanduceros que están preocupados por guardar, con forma de colecciones, el pasado de nuestro solar a través de un hobby que cada vez gana más adictos en el mundo. Yo fui de paso por Paysandú y soy una sanducera más, aunque ahora resido en Montevideo, una de las privilegiadas personas que visitó esa muestra, que sé que es tan solo una muy parcial muestra de lo que pueden exhibir tantos coleccionistas que viven en Paysandú y que poseen valiosas piezas de filatelia, numismática, postales y testimonios de ayer. Aprovecho esta oportunidad para destacar que, nunca sabré por qué Paysandú es tan timorato, despreocupado o vaya uno a saber qué razones tiene para no destacar las cosas verdaderamente destacables que tienen sus vecinos y a veces me pongo a pensar que es por eso que nos hemos quedado completamente retrasados en materia de turismo y claramente superados por departamentos que hasta no hace mucho nos ponían como ejemplo de segunda ciudad capital de la República.
Yo quisiera ocuparme solamente de un ejemplo que aunque parezca menor no lo es, si lo vinculamos a noticias que de tanto en tanto ocupan espacios destacados en diarios y revistas de la capital y sigo diciendo que es un ejemplo que un destacado vecino del departamento de Colonia, al que yo también tuve el honor de visitar, posee una colección de lápices que figura en la Guinness como la mayor del mundo.
Y este ejemplo me permito destacar porque sé que también en Paysandú y eso lo saben muy pocos, el señor Rubens Francolino, que a través de la política llegó a ser varias veces diputado por el departamento, posee la que es tal vez y eso se está tramitando, la mayor colección de botellitas de licores en miniatura del mundo. Creo que alcanza los 25.000 ejemplares de más de cien países. Cuando me interesé mi padre me informó además, que Francolino fue también durante años periodista de EL TELEGRAFO en años que lo dirigía su abuelo y más tarde su padre, lamentablemente desaparecidos ambos.
Agradecida por la atención y eventual publicación de estas líneas, saludo al director con especial muestra de simpatía. Felicitaciones a los Coleccionistas de Paysandú y a su gran Diario que los apoya.
Sanducera y coleccionista

NdeR: Respecto a la colección de botellitas del señor Rubens Francolino, hace ya varios años se le hizo una extensa nota que fue publicada en nuestra revista Quinto Día.

RECIBIMOS Y PUBLICAMOS
Comité Departamental de Cruz Roja de Paysandú 1975 – 10 de noviembre – 2010
El 10 de noviembre se cumplen 35 años de la fundación del actual Comité Departamental de Cruz Roja de Paysandú.
Por iniciativa de la Sra. Blanca Olsen de Wuare, un grupo de entusiastas voluntarias, nos reunimos con el Dr. Juan Carlos Chaus Caviglia (Pte. de CRU) y otras autoridades en el Salón del Aero Club con el fin de crear el Comité Departamental de Cruz Roja, pues el anterior estaba inoperante (1º de noviembre 1975, consta en Acta Nº 1).
Recibí el honor de ser designada Presidente, cargo que no pude aceptar pues entonces trabajaba como Prof. de Idioma Español y carecía de tiempo para dedicarme a Cruz Roja como esta Institución merecía.
Se llamó a nueva reunión (10 de noviembre 1975, consta un Acta Nº2), y se integró el Comité de Cruz Roja, presidido por la inolvidable Dr. Mary L. de Echeverrigaray, yo acepté un cargo de menor responsabilidad pero idéntico compromiso de amor y solidaridad, durante los próximos 7 años. Al iniciarse las actividades del Instituto Canadá (la obra de mayor envergadura logrado por nuestro Comité) la Dra. Echeverrigaray ocupó el cargo de Directora Técnica y yo fui elegida Presidente, cargó que ocupé durante 22 años, en los cuales se fueron renovando los comités, con nuevos integrantes, valiosos y comprometidos con nuestra obra al servicio de la comunidad.
Al dejar la Presidencia, me sucedieron dos compañeras, quienes demostraron vocación, capacidad y entrega, valores esenciales para cumplir con los objetivos de la Cruz Roja: Sras. Mary Zapata de Zeni, Alba González de Casella y actualmente de nuevo la primera de las nombradas.
Con la emoción que evoco estos años de mi vida, plena de esfuerzos y logros, creo que mi misión está cumplida, que he respondido con honor al legado de Henry Dunant, quien nos marcó la senda y señaló, en forma inequívoca nuestro lugar en el mundo.
De aquel grupo de entusiastas voluntarios que integramos como fundadoras, el Comité de Cruz Roja, solo quedamos tres cruces rojas activas: Sra. Nirma Chirigliano de Coll, María Elena Améndola de De León y yo, entrañables amigas que desde distintos cargos seguimos vinculadas a la Cruz Roja, que amamos y servimos como el primer día.
Vaya hoy un afectuoso recuerdo hacia los compañeros ausentes físicamente, pero vivos en nuestros corazones.
Felicitaciones y los mejores augurios, a los queridos compañeros del actual Comité Departamental de Cruz Roja, por la marcha de la Institución amada y respetada. Y, finalmente, mi entrañable agradecimiento al pueblo de Paysandú, autoridades, instituciones, prensa oral, televisiva y especialmente a diario “El TELEGRAFO” por el permanente apoyo y confianza que me dispensaron durante mis largos años de actuación en Cruz Roja, bases indispensables para la viabilidad de todas las acciones.
Sea éste el balance de mi vida de cruzrrojista a consideración de mi amado Paysandú y su gente. Prof. Diva M. de Firpo

LA VOZ DEL PÚBLICO
Desde Pueblo Gallinal
Días pasados en la escuela del lugar se realizó el cierre del concurso “Paysandú Verde”, con la presencia de Imaginateatro.
Todo transcurría en un clima de festejo hasta que llegó el momento de nombrar al niño ganador del concurso; entonces las maestras --con excepción de una-- y maestro se ofuscaron porque este niño no había sido el que ellos hubieran preferido como ganador. Desacreditaron así la palabra del jurado presente, integrado por un fotógrafo y la coordinadora de centros MEC de Paysandú.
En sus caras se visualizó el descontento expresando su enojo a los demás niños para que éstos reaccionaran de igual manera frente a su compañero, cosa que algunos hicieron, provocándole al chico una sensación de angustia y tristeza.
Además las docentes hasta llegaron a plantearse hacer una nota para solicitar que se reconsiderara el fallo. Parece que acá todos merecen recibir un premio menos mi hijo. ¡Maestras de Escuela Nº 110, no se puede desmerecer el trabajo y esfuerzo de un alumno de esa manera! Laura Rodríguez

RECIBIMOS Y PUBLICAMOS
Marihuana legal
Después que se habló de internado forzoso a los drogadictos, ahora se habla de legalizar el consumo y la producción de la marihuana. Es increíble, o no tanto tal vez, como de la misma forma que te dicen una cosa también te dicen la otra. Por más que los que la consumen digan que no provoca adicción como alguna de las drogas legales. Esta es un alucinógeno que sirve como puerta de entrada para drogas más duras y si hay otras legales como el cigarrillo que producen más adicción y problemas a la salud, el que se consuman en forma legal es la mejor prueba para corroborar que la legalización no soluciona nada, por el contrario nos trae más problemas, y bastantes para tratar de retirarlas del medio. Si no se prohíben definitivamente es porque tienen muchos años de tradición legal en el mundo y no porque sea más saludable para la sociedad y en especial para nuestra juventud a la cual hay que darles pautas claras de vida sana. C.I. 3.520.524-1

SOLICITADA
Halloween
Esto pasó el año anterior. Soy jubilado, tengo hijos y nietos y me considero un buen vecino. Con sacrificio logré arreglar y pintar el frente de mi humilde casa. Vivo en Vizconde de Mauá al Norte de calle Charrúas. Dicho esto paso a relatar lo sucedido. En el día de esta ¿celebración? recibí casualmente la visita de mi cuñado de Santa Fe y uno de mis hijos que vino a mostrarme su auto nuevo. Con mi señora habíamos comprado caramelos y juntado monedas para obsequiar a los chicos que vinieran a solicitarlos con motivo de esta ¿fiesta?
Les dimos todo hasta terminar y luego fuimos a atender a nuestras visitas. ¿Qué logramos con esto? Una triste muestra de la educación y respeto que imparten en los colegios de estos chicos. Cuando salimos a despedir a nuestros familiares, nos encontramos con sus autos que les habían reventado no menos de diez huevos a cada uno y el frente de nuestra recién pintada casita, con chorretes de huevo que nunca más pudimos limpiar. A un vecino que estaba haciendo el zaguán y puerta de garaje de madera nuevos les pasó lo mismo. Mis familiares hicieron lavar sus autos.
Les pido a los señores maestros o profesores de estos jovencitos, que les enseñen cultura y respeto para con sus mayores y a cantar nuestro hermoso himno y que no sea en tiempo de murga. Este año los esperé con la manguera conectada. El que avisa no es traidor.
P/D: ¿Por qué en un lugar de romper tantos huevos no los regalan a los hogares de niños o ancianos? Lo agradecerán. Quedo a sus órdenes. C.I. 3.802.370-7

SOLICITADA
Wilfredo Raymondo
Los grandes tienen el poder de proyectar una enorme sombra y debajo de ella nos cobijan a todos. Eso fue Raymondo, un grande del deporte uruguayo que cobijó a infinidad de nadadores y remeros que hoy guardan un silencio respetuoso y profundo frente a su desaparición. Nació en Colonia, pasó lo mejor de su vida deportiva en Paysandú y terminó su vida en Maldonado.
Trabajando siempre, formando deportistas, moldeando hombres que en su accionar y su vivencia le dieron perfil a nuestro país. ¿Cómo olvidar al Chivo Rodríguez o a Ana María Norbis a Scaravino, a Felipe Vidal formados por él y que con la pasta de él hayan hecho el deporte un culto?
Pero nombrado algunos no excluimos al conjunto de hombres y mujeres que supieron de sus directivas y de sus consejos invalorables en el aspecto humano.
Supo de triunfos y derrotas pero siempre se levantó al otro día para empezar de nuevo sabiendo que en el transcurso del tiempo el éxito es efímero y la derrota pasajera. Lo que importa es el Norte a seguir y ese es el camino que hace grande a los hombres. Fue un hombre de perfil bajo y moral elevada.
Personas como él no quedan en el olvido, porque son ejemplo a seguir, son antorcha, son guías. Hoy que su Club Remeros, el que tanto quiso, está en peligro tiene en él un Norte donde aferrarse para seguir adelante en esa lucha para buscar un bien en lo individual y en lo colectivo. Que su pasaje a la otra vida nos sirva de guía, sacudiendo la modorra de Paysandú. Para levantar su figura y que ésta sea nuestro Norte y nuestra guía.
Daniel Durán del Campo

Solicitadas
El 20 de octubre del presente se cumplieron ya 5 años del fallecimiento de la doctora Mariela Andrea Illia Guilleminot, destacada abogada de nuestro medio. Aún recuerdo con mucho dolor aquella triste tardecita del jueves 20 de octubre de 2005 cuando ocurrió su lamentable deceso. A 5 años de su pérdida pregunto: ¿se ha hecho justicia?; ¿el asesino ha sido condenado?; ¿alguien sabe a cuántos años de prisión fue condenado?; o mejor dicho ¿cuántos años le dieron? Frente a estas preguntas me puse a averiguar y grande fue mi sorpresa cuando me enteré de que aún la justicia no ha podido fijar la pena.
Ante esta información no puedo menos que expresar en estas pocas líneas mi indignación y requerir de quien corresponda la respuesta inmediata a una situación que no puede durar 1 minuto más. ¿Cómo que a 5 años del asesinato de Mariela Illia aún no se ha fijado pena al asesino?; ¿Cómo es eso? ¿No es que los jueces aplican las leyes? No me digan que no han encontrado en las leyes, códigos, etcétera, pena para castigar tan horrendo crimen. Señores Jueces si esto es verdad a Ustedes pido por favor; exijo como ciudadano la aplicación inmediata de la ley, que su peso caiga sobre el responsable de una vez por todas. El caso de Mariela Illia está dentro de la llamada violencia doméstica, de género contra la mujer en estado de indefensión frente a la agresividad desmedida y cobarde de aquellos que dicen ser hombres pero que indudablemente no lo son. En el presente año, a comienzos del mismo (no recuerdo la fecha), la Intendencia de Paysandú realizó un homenaje y recordatorio a las victimas de la violencia doméstica y de género mencionando entre otras víctimas la por entonces Intendenta Helena Heinzen, a Mariela Illia, recordatorio que quedó emplazado en Plaza Constitución frente a la sede judicial, tal vez así los jueces cuando pasen frente al mismo puedan dirigir su mirada allí y al menos recordar tan desgraciados hechos y aplicar la ley y hacer justicia.
Hoy a 5 años de aquella desgraciada tarde para todos los que la conocíamos y queríamos realmente no puede bajo ningún concepto mantenerse la situación de este asesino sin condena, sin sentencia. Por otra parte no quiero imaginarme el estado de decepción, de desesperación y de impotencia que deben estar sintiendo sus familiares, padres y hermano frente a esto. Señores Jueces por favor apliquen la ley, hagan sentir a los ciudadanos que el Poder Judicial existe, funciona y que de él se puede esperar justicia. Un sanduceromuy preocupado

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Me dirijo a todos los lectores de EL TELEGRAFO para dar a conocer mi nota, que quisiera titular “Ojalá algún día”. El pasado setiembre fui a la Meseta de Artigas con mi familia para festejar “La semana del Patriarca”, viendo allí en el lugar a los Bomberos Voluntarios de nuestra ciudad, e inmediatamente me acordé de una persona que prácticamente fue el creador de los Bomberos Voluntarios de Paysandú. Me refiero al ex jefe, oficial Héctor Machado. Yo creo que mucha gente se debe acordar de él por la cantidad de obras que hizo por nuestra querida Heroica, un hombre abierto, un hombre de bien, con muchas ganas de trabajar por la sociedad y que hizo mucho bien a nuestro departamento con su presencia, por haber sido no solamente el creador de los bomberos voluntarios sino por sus logros, su profesionalismo, su integridad como persona y su forma de vincularse con todas las autoridades departamentales y nacionales. Tuve la suerte de concurrir a varias fiestas organizadas por él, en el Día del Bombero, con el propósito de agasajar a los bomberos y su familia como así también a todas las autoridades que colaboraban con el Destacamento durante todo el año --nunca más supe que se organizaran otras--, en las cuales concurríamos todos, bomberos, familia y amigos.
Allí se agasajaba a todos y veíamos cómo la “institución bomberos” había incursionado en sociedad, por su capacidad de relacionarse públicamente. Sé bien también que se trabajó en forma organizada, con todas las instituciones del departamento, Intendencia, ejército, policía, todos, lo que llevó a que conociéramos a la institución.
Recordar también que en ese tiempo se pudo equipar un poco más al departamento de nuestra ciudad, se brindó un mejor bienestar para los bomberos en vestimenta, en la parte edilicia, en comodidad y hasta ropa para los voluntarios. Por eso simplemente se me ocurrió escribir esta nota, con el propósito de recordar a una persona que con su compromiso, profesionalismo y capacidad de hacer amigos, hizo muy bien a nuestra querida Heroica; y pregunto si alguna vez podremos contar con esta clase de persona en nuestro departamento, lo que nos haría muy bien para poder ser lo que un día fuimos. Ojalá algún día pudiéramos contar con esa clase de gente capacitada, organizada, con compromiso, con ganas de trabajar, etcétera. Ese tipo de personas haría muy bien a nuestra querida Heroica para volver a ser lo que un día fuimos. CI 2.803.851-6

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Por fin nuevamente estaba ahí. Es que seguí tantos partidos mirando buen basket en ese estadio remodelado, que el partido, internacional por cierto, lo ameritaba. Y encima mi querido equipo había invitado a un equipo de buen nivel, argentino por si fuera poco y la noche se prestaba.
Jugábamos frente a la Unión de Colón, un equipo profesional que por si fuera poco, tiene como presidente a Cristian José Delasoie, hijo de Carlos, uno de los impulsores y fundadores del Paysandú BBC que habían venido acompañando a su equipo para dicha práctica oficial. Llego termo y mate en mano, entrada gratis como tanto nos gusta a los sanduceros y me ubico cómodamente. Y empezó a llegar algo de gente, familiares, gente de algún otro equipo, algún periodista y hasta algún alumno del Isef se prestaba a quedarse.
Y tenían extranjero y todo, un cubano que hasta parecía ser alguno de aquellos que “desfilaron” por el equipo de la ciudad, hasta eso tenían…
Y así se fue poblando, con gente que llegaba, los equipos calentando, estaban los jueces, era una Práctica Oficial, como bien se sabía. Pero empecé a notar que algo faltaba, sentía un ambiente raro, hasta que me di cuenta… no había reloj, ni tanteador, ni 24 segundos.
Bajé como medio desesperado --los equipos aún calentaban-- a preguntar qué había pasado y me llevé la gran sorpresa: “el director de Deportes de la Intendencia no presta el reloj, porque no es un partido por puntos”.
¡Qué Barbaridad!
Realmente sentí una gran vergüenza. ¿Vio cuando uno siente vergüenza de algo que hasta es ajeno? Bueno, eso sentí yo. Porque veía cómo mucha gente de mi club intentaba hacer algo diferente, traer a un equipo de otro lado, llevarlo a un estadio con muy buenas comodidades y brindar un espectáculo diferente aunque sea un martes y porque el Sr. director de Deportes, el Sr. Pablo Curbelo, se le da la gana de no autorizar el funcionamiento del reloj, instrumento esencial en la práctica de dicho deporte, cuando el encuentro está catalogado como una práctica oficial y no un simple entrenamiento, es algo realmente triste.
Y así se jugó, sin reloj, sin tanteador, sin 24 segundos. Menos mal que la gente argentina entendió la situación burocrática que tenemos que aguantar en este país, de que una persona que no interpreta que una práctica oficial se realiza con todas las condiciones reglamentarias que se deben utilizar para practicar dicho deporte sin importar si se suman puntos o no en dicho juego.
Realmente me da mucha pena ver a Paysandú así, decayendo, teniendo en el podio a gente que no es capaz de darse cuenta que debemos levantar esto, con ideas nuevas, buscando espectáculos diferentes y no con ese “balde” de decir que tienen el poder y nada más. Muy bien la gente del estadio, que en todo momento colaboró y se los vio muy atentos. Me fui triste ese martes, pero no porque el equipo perdió sino porque no sé si algún día con gente como esta podremos salir adelante, querido Paysandú. Hincha bohemio.