Rurales | 27 Nov La exportación de ganado en pie está dando mucho que hablar en estas últimas semanas. La irrupción de Turquía como un importante mercado de destino generó preocupación a nivel de la industria frigorífica, la que fue trasladada al gobierno.
Pero los números fríos de lo que se lleva embarcado de ganado vivo en lo que va del año no muestran un desbalance significativo respecto al anterior, cuando nadie cuestionaba la política. Entre diciembre de 2009 y octubre de 2010, de acuerdo a datos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), dados a conocer por Faxcarne, Uruguay exportó 142.646 vacunos para faena, sólo 1,3% más que en el mismo período anterior, cuando sumaron 140.750 animales. De ese total, 58.013 cabezas (40,7%) corresponden a Turquía. Lo que se destaca es que esa cantidad se compró en los meses de julio, setiembre y octubre, ya que antes ese mercado no estaba habilitado.
Si se suma la exportación en pie y la faena, en los primeros 10 meses del año la primera significa 6,5% del total, una proporción interesante pero para nada demoledora. Además, corre aquello de que todo es relativo; los industriales laneros estarían fascinados si la proporción de lana sucia exportada fuera de sólo 6,5%.
Está bien ser liberales, pero no tontos, dirá el presidente Mujica. Turquía inviabiliza la entrada de carne vacuna y otorga ventajas para los embarques de ganado en pie, determinando de esa manera una competencia desleal entre los frigoríficos uruguayos y los turcos. Esto llevó a que en su audición radial el presidente expresara que “es posible que tengamos que revisar algo que hemos defendido que es mantener la puerta abierta de la exportación en pie”. Por ahora, sin embargo, de eso no se habla. Los rumores indican que podría haber alguna resolución en este sentido recién para los embarques del año próximo. Las operaciones de noviembre y diciembre (Gladenur anunció que comenzó compras para un nuevo barco el mes que viene) están garantizadas.
Pero mucho más significativo de lo que puede llegar a significar el potencial del mercado de Turquía para el ganado en pie uruguayo, son los países socios del Mercosur. Tanto en Brasil como en Argentina los precios de la hacienda --faena y reposición-- son muy superiores a lo que se paga en Uruguay. La semana pasada se dio el primer embarque de vacas para faena hacia Brasil desde el mes de enero. Los exportadores (el escritorio Valdez y Cía.) aseguran que en los próximos días estarán saliendo novillos.
Argentina
Más aún, avanza la posibilidad de que se abra la puerta para la exportación de ganado para engorde a Argentina. Fuentes oficiales expresaron que ya se acordó el protocolo sanitario con Argentina para el ingreso de ganado uruguayo para la reproducción. Según los técnicos consultados las exigencias sanitarias para el ingreso de ganado para engorde son similares que para los reproductores.
En Argentina el precio de los terneros oscila en los U$S 3 por cabeza, en tanto que en Uruguay no alcanza a U$S 2. En declaraciones a Faxcarne, un industrial argentino vaticinó que si se llega a liberar la exportación de ganado para Argentina, “no va a quedar un ternero en el litoral” uruguayo.
Con ambas puertas bien abiertas, la de Argentina y Brasil, Turquía va a quedar como una anécdota. Para ese entonces se podrá decir: “Argentina tuvo una desastrosa política hacia la producción ganadera, que hizo desplomar el estock vacuno, y el pato lo pagamos nosotros”. Pero entonces habría que recordar también que esa desastrosa política argentina también trae sus beneficios en el mercado de exportación, con precios mucho más altos a los que habría si Argentina estuviera produciendo normalmente.
Es por eso que los “remiendos” a los mercados no suelen traer beneficios. Siempre le cabe un remiendo más arriba. Es verdad, no hay que ser tontos, pero si se puede, hay que dejar funcionar a los mercados.