Deportes | 01 Dic Tan solo unas horas duró la expectativa por saber si Julio Coiro, el nombre propuesto por la Comisión Coordinadora para ser entrenador de la selección de Paysandú, sería finalmente quien orientara al combinado en la Copa Nacional de Selecciones.
Es que el laureado técnico, el más ganador del fútbol del Interior, se bajó anoche de la candidatura tras haber reflexionado sobre los pro y los contras de volver a sentarse en el banco de una selección de Paysandú.
Anoche, sobre las 21, Coiro planteó al vicepresidente de la Liga, Mario Costa, que su nombre no fuera propuesto mañana ante la Asamblea, que será la que brinde o no el visto bueno a la elección de los neutrales.
Los motivos de la decisión del entrenador están claros. Y es, sobre todo, una decisión lógica en medio de lo ilógica del fútbol sanducero.
“Lo voy a pensar un poquito. Me halaga que tengan en cuenta mi nombre, pero no la veo tan bien como para tomar esta posibilidad, porque hay muchas cosas para conversar”, dijo el técnico el martes, minutos después de que la Coordinadora confirmara su nombre. Anoche, a menos de 24 horas, Coiro optó por bajarse de la posibilidad. “Hay mucho problema, demasiadas cosas que no están definidas. Ando bien físicamente y no quiero complicarme”, dijo el técnico a EL TELEGRAFO, confirmando que dejaba atrás la posibilidad de ser el técnico de la selección mayor del fútbol sanducero.
El entrenador ya había manifestado su preocupación por los problemas que puedan surgir a la hora de preparar a la selección, que en los últimos tiempos han surgido y a granel, antes y durante la participación del combinado en la Copa Nacional.
Coiro seguramente puso en la balanza si arriesgaba una última vuelta al frente de la selección, teniendo como posibilidades el sellar su carrera con una gran participación o sumarse al fracaso de los últimos años, o bien se quedaba en casa con todos sus títulos a cuestas, tranquilo, sin dolores de cabeza y disfrutando de la familia.
Por eso, hubo lógica. Coiro mantuvo la cordura que lo caracteriza. Y dejó al descubierto un nuevo problema para la Coordinadora, que mañana presentará entonces al Plan B, al segundo nombre que estaba en carpeta y que fue votado por dos de los cinco integrantes de la comisión.
Así, Sergio Esquivel prepara la vuelta para orientar a la selección, que en cuestión de horas pasó de un “Gringo” a otro.