La infraestructura está

Locales | 07 Dic Tras siete meses de trabajo de la empresa constructora, se dio por culminada ayer la primera parte de las tareas en el barrio Don Bosco, asentamiento integrado por 80 familias que vieron regularizada ahora su situación en el marco de las acciones del Programa de Integración de Asentamientos Irregulares (PIAI).
Las obras comenzaron el 7 de abril con un plazo -que se cumplió normalmente- de 7 meses y el monto exacto de la inversión de la empresa constructora fue de $20.290.229,37. Los trabajos se habían licitado en 2007, pero variaron sustancialmente los costos de construcción, por lo que hubo que hacer un nuevo llamado, cuyo contrato se firmó a principios de este año; de manera que se trató de una obra hecha entre dos administraciones municipales.
“qUEDAN COSAS POR HACER”
Alexandra de Maris, una de las vecinas integrantes de la Comisión del barrio, dijo a EL TELEGRAFO que la pequeña fiesta de cierre de obra “es porque el PIAI está trabajando en el barrio, y la empresa Cujó terminó con su parte. Por eso la Comisión organizó esta fiesta que es de un cierre previo, porque todavía quedan cosas para hacer, pero que nos corresponden a los vecinos y la Intendencia”.
Del evento participaron los trabajadores que durante estos siete meses hicieron las obras, los representantes de la empresa José Cujó y también de la Intendencia de Paysandú.
Las obras que se hicieron fueron “saneamiento total para los vecinos, doce realojos que están en Cerrito y Meriggi y otros dos acá mismo en el sitio también se hizo trabajo de vialidad, cordón cuneta, agua potable, red de energía eléctrica y alumbrado público”.
BITUMEN Y LUEGO LOS TÍTULOS
Ademas, ya todas las casas tienen “regularización total, todos con luz, agua potable y saneamiento”.
Otro de los temas que resta es la bituminización de las calles, que está a cargo de la Intendencia, otros trabajos que deben hacer los vecinos en sus propias viviendas y luego la titularidad de los predios, que se hace en forma posterior a la entrega final de las mejoras que recibió el barrio.
A juicio de la vecina, las tareas que quedan demandarán varios meses más, porque “ahora hay que ver qué mejoras necesita cada familia, capaz techo algunas, revoque otras, eso lo habla el arquitecto con cada familia”.