Paysandú, Viernes 10 de Diciembre de 2010
Locales | 05 Dic Plebiscito: “Resolución tomada por un pueblo mediante votación”, reza el diccionario de la lengua española. Los adalides, los abanderados de los derechos humanos, la voluntad popular, la moral, la ética, la transparencia, o sea el Frente Amplio, sabe muy bien la etimología de esta palabra. De hecho ha usado y abusado de esta herramienta democrática, muy válida, si se respeta su resultado.
No es el caso de los plebiscitos invocados para anular la ley de caducidad, dos en los cuales El Pueblo dijo que no a la anulación en ambas ocasiones.
En la primera, según el FA, la gente no votó en total libertad, votó presionada, asustada, porque según ellos no regía una democracia plena. Como si fuera muy fácil asustar a un pueblo. No se debe subestimar a un pueblo.
Pero para no quedar con la duda, se habilitó el segundo plebiscito en el 2009, donde la gente votó en “total democracia” y ¡oh sorpresa!, por segunda vez rechazó la anulación de la ley de caducidad. Fue un golpe bajo para estos seudo- demócratas, para los que la democracia y los pronuncimientos populares son válidos e intocables solo cuando son favorables a sus intereses.
No es muy difícil imaginar el barullo, el escándalo que haría el FA, si uno de los partidos tradicionales, intentara cambiar el resultado de uno (o dos) plebiscitos mediante vía parlamentaria. Las palabras “pueblo, soberano, fallo inapelable, instancia democrática”, se escucharían y leerían a cada momento y se trataría a los propulsores de este mecanismo como de autoritarios antidemocráticos, dictadores, ¿y saben qué?, sería con total justicia y razón. Porque esto de desconocer el pronunciamiento de la gente es autoritarismo, es antidemocrático, y se aproxima mucho a un acto dictatorial, lo haga quien lo haga.
El pueblo, la gente es la que se expresa en un acto electoral, sea cual sea, una elección donde se eligen las autoridades, o un plebiscito donde se ratifica o se anula o se deroga una ley o cualquier otra instancia. Todas se deben respetar señores. ¿O que les parecería que se pusiera en dudas su propia elección? La suya Señor Presidente o la de ustedes, legisladores del FA. ¿Inaceptable no? ¿Antidemocrática no? Bueno, eso es esto, un atropello.
¿Con que cara van a volver a plebiscitar alguna ley o lo que fuere?... si después no les sirve el resultado y lo arreglan en el parlamento abusando de la mayoría parlamentaria y la “disciplina partidaria”.
¿Democracia? Mmm... Esto tiene mal olor. No aceptar que haya gente que piense diferente. No aceptar el fallo de las mayorías, tiene mal olor. Debe ser minoritario el porcentaje de la población que está a favor de esta ley. Quien escribe tampoco lo está. Pero por alguna razón la mayoría votó por ratificarla.
Lo preocupante y condenable ahora, es la postura del oficialismo y el Pit-Cnt de no aceptar este fallo.
La hipocresía en que vivimos los uruguayos en materia política, lleva a mirar pasivamente esto, que si hubiera sido hecho por otro partido político, ya hubiera llenado las calles de marchas con banderas, escraches, mitines políticos, etcétera.
En un país serio, esto no debería tener dos opiniones. Fuera quien fuera que lo haga. Esto es dictadura sin uniforme.
Es el mismo país en el que el Pit-Cnt, la central obrera representante y voz de “todos los trabajadores”, se arroja el derecho y la obligación de juntar firmas para habilitar un plebiscito, concretamente éste, invocando la voluntad de los trabajadores. En los años que llevo afiliado a mi gremio, dependiente del Pit-Cnt (y aportando), jamás se me consultó sobre este u otros temas en los cuales el Pit-CNT incursionó cual partido político. ¿Democracia? ¿Participación? ¿Los derechos humanos de los uruguayos son acotados en el tiempo e ideologizados? ¿Son desde los años 70 hasta el 85? ¿Son solamente para la gente de izquierda, autoerigidos y autodenominados mártires de la patria? No existen para soldados, policías, civiles, muertos por los tupamaros en ese tiempo y tampoco existen para el ciudadano común de hoy en día, atropellado, robado, asesinado, violados, desprotegidos. No entiendo este “gobierno progresista” que quizás lo que la gente quiere es que se ocupen de la realidad, dura realidad de hoy y no la de hace 30 años o más.
Es un clamor popular señores “progresistas”. Es el soberano que se expresó y para eso los eligió. Ya se les comenzó a caer la máscara.Florentino
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Me he tomado varios días para descifrar la solicitada de Gastón Pesce, infame y alevosa.
Pienso cuando se adjudica lo que la gente piensa que es un “ogro feroz” no es así, porque compararse con un animal no le cabe. Hasta el animal más feroz: -chacal, hiena- preservan los de su misma especie.
No sé en qué escala colocarlo. La solicitada no tiene perdón de Dios como Ser Supremo Universal, más allá de las leyes y los hombres.
Derramar su siniestra idea de ventilar en forma baja, incorporando más maldad con pasajes íntimos de una persona que no se puede defender, lo pinta de cuerpo entero lo que es.
Este ser despreciable, con la propia mano que escribió fue la que mató alevosamente.
Pienso que todo sanducero estará horrorizado de esta nota y aunque pida el perdón de Dios, no le alcanza para justificar tamaña infamia.
No sigas, Gastón ensuciando. Acuérdate de tus padres y de los de Mariela por su eterno sufrimiento. Ciudadana indignada
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Para vos, Gastón Pesce
En estos días que se celebra el “No a la violencia a las mujeres”, perplejidad e indignación me dio leer lo que escribió este individuo que, no conforme con haberle quitado la vida -con haberla maltratado en vida- (ella tenía custodia policial), la mató de dos maneras, pues ahora la mata difamándola. No conforme con haber matado con alevosía, premeditación ¡quieres justificarte! de ese crimen atroz que cometiste. Y más atroz aún lo que has escrito; te pinta como lo que sos, un gran fabulador que aún sigue destrozando a una familia que perdió a su hija.
Lo tuyo, Gastoncito, no tiene límites. A los memoriosos y a los que respetamos la vida no nos vas a psicopatear con esa carta que vos creés te va a pintar de “inocente”. No, querido, seguís preso y eso es para toda tu vida. Clamás por los derechos humanos, esos derechos que no tienen los familiares de las víctimas. ¡Ojalá la justicia caiga con todo su peso! Así estamos a salvo de tener en nuestras calles sujetos como vos, que nos quieren hacer creer que sos el “gran inocente” de esta tragedia que cometiste.
Has caído tan bajo, pero tan bajo, que esa carta no la tendrías que haber escrito nunca. ¿Qué ganaste con eso? ¿Qué pensás que la ciudadanía va a pensar de vos? ¿Pensás que te vamos a justificar? ¡Pobre si pensás así! Eso demuestra lo enfermo que seguís estando.
¿Te pusiste a pensar lo que sería el mundo si saliéramos a matar tomando la justicia por mano propia? ¿Para qué los abogados y las cortes? ¿Qué te enseñaron en la facultad? ¿Te enseñaron que así se hace justicia, asesinando como vos lo hiciste y escribiendo una página de un diario justificándote? ¿Así que según vos estuviste genial?
No solo genial, sino que fuiste justo, que cometiste un crimen porque según vos, esta persona se lo merecía por su pasado y porque no te quería más y quería comenzar su vida nuevamente. Y vos, lleno de odio, no supiste dar un paso al costado y alejarte. Tu mente enferma no lo soportó y no te importó llegar al lugar del hecho y matarla cobardemente en presencia de otra persona.
Y perdoná que te conteste, pero quedarme callada hubiera sido estar de acuerdo con vos, y yo no pienso así. Pienso que por más grande que sea el problema, está la justicia, que nadie tiene derecho a matar (como vos lo hiciste), que no tenés derecho a justificarte, injuriando a la persona que mataste. Lo que tenés que tener es humildad y códigos (ya que carecés de ambas) y decirte por último que los que como yo estamos en defensa de la vida, de la justicia, estamos por el “No a la violencia a la mujer”. No olvidamos lo que hiciste y no te perdonamos.
Elisa Marín. DNI Arg 10.837449. cédula de Policía Federal Argentina 14077972
RECIBIMOS Y PUBLICAMOS
El comunismo chino y la prisión del Premio Nobel
de la Paz del año 2010: Profesor Liu Xiaobo
Este año al otorgarse el premio Nobel de la Paz, el mismo fue para el profesor chino Liu Xiaobo, lo que provocó la destemplada reacción del gobierno comunista de China protestando por esa decisión académica que distinguía a un conciudadano de ellos. El problema de fondo era que el profesor Xiaobo es disidente con la ideología y métodos del comunismo gobernante en China, razón por la cual le cayó encima una condena de once años de prisión acusado de “subversión del poder del Estado”. El Ministro de Relaciones Exteriores de China ha difundido al mundo que el profesor Xiaobo “es un criminal condenado por el sistema judicial chino porque ha violado las leyes chinas” y opinó que debido a eso, la decisión del comité Nobel noruego, es contraria a los principios del premio.
¿Cuál es la culpa de Liu Xiaobo? El 15 de abril de 1989 murió el ex Secretario General del Partido Comunista chino, Hu Yao Pang sobre quien estaban las esperanzas del “revisionismo” o “humanización” del régimen. El 17 de abril, 100.000 estudiantes manifiestan por el duelo y piden democracia y reformas en Pekín. Entre el 18 y el 20 de abril se produce una “sentada estudiantil” frente a la Casa del Pueblo cerca de la Plaza Tienanmen.
El 22 de abril se efectúa el funeral de Hu Yao Pang y se producen disturbios en Pekín, Sian y Changsha. En todo mayo se viven días de grandes tensiones con cientos de miles de estudiantes en la calle y la adhesión de masas obreras que piden la dimisión del hombre fuerte de China: Teng Hsiao Ping. El 20 de mayo se aplica la “Ley Marcial” en Pekín. Y en la madrugada del 4 de junio de 1989, los soldados del “Ejército del Pueblo” a bayoneta calada, con tanques y carros armados llevan un ataque de siete horas provocando una masacre entre los cientos de miles de estudiantes desarmados que ocupaban la Plaza de Tienanmen. Fuentes internacionales estimaron en más de 4.000 los muertos en el acto. Hubo otros tantos heridos y luego vinieron las “purgas” con decenas de miles de detenidos entre simpatizantes, profesores, intelectuales y estudiantes. Liu Xiaobo, fue en aquel tiempo firmante de la llamada “Carta 08” que reclamaba públicamente que China avanzara hacia la democracia. Acusado por eso fue detenido y estuvo preso un año y medio sin condena siendo luego enviado a un campo “re educación por el trabajo” por haber participado de actividades reformistas y opinado sobre la liberación de presos de opinión. Finalmente fue condenado a 11 años de prisión y estando preso le fue otorgado el premio Nobel de la Paz 2010, justamente por su larga y no violenta lucha a favor de los Derechos Humanos fundamentales en China. El gobierno chino censuró la noticia especialmente en Internet y los SMS que contenían el nombre de Xiaobo fueron bloqueados tratando de impedir que el pueblo supiera del reconocimiento mundial a un libre pensador que desea que su país salga de la opresión a que son sometidos sus habitantes.
El gobierno chino, creyendo que en Noruega se pueden aplicar métodos de presión sobre la opinión de los académicos, instó al gobierno noruego a que no le diera el premio a Xiaobo advirtiéndolo que eso afectaría las relaciones diplomáticas entre ambos países. A eso el Ministerio del Exterior de noruega contestó que el reclamo no tenía sentido porque el Comité del Premio Nobel es privado e independiente del gobierno del país. Con ese diálogo internacional quedó claro que diferente es la forma de vivir entre la concepción occidental y los férreos cánones del comunismo. Sobre todo el chino, que es el más sanguinario represor de los que no le obedecen. No obstante con su filosofía marxista todo es y no es a la vez, ellos han creado un régimen “comunista represor- capitalista invasor”. Son la mayor máquina de crear multimillonarios a base del trabajo casi forzado de millones de brazos que trabajan por la cama y la comida. Los creadores de los barcos- fábrica con el método de la “cama caliente”: un camarote, una máquina, dos obreros y tres turnos de 8 horas todos los días de corrido. También es el país donde se instalaron las fábricas extranjeras productoras de autos super lujosos que se los venden a los grandes capitalistas chinos nacidos bajo el patrocinio del comunismo. Todo un himno a la hipocresía y a la desigualdad social envuelta en la fina seda de los “cuentos chinos”, para que los aplaudan los seguidores de las distintas gamas de las izquierdas del mundo. Cuando se habla de derechos humanos, es bueno recordar los sufrimientos de los cientos de millones de habitantes de China comunista que pugnan aún infructuosamente por conseguirlos. Edil Ramón Appratto
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