Nacionales | 07 Dic Menos aprobación
Además de estar enfrentado a varios gremios, ahora el presidente José Mujica recibe la noticia de que el nivel de aprobación en la población continúa cayendo en forma sostenida. Según Interconsult, Mujica inició en marzo su gestión con un 74% de aprobación y una desaprobación de solo el 4%. Pero ahora la comúnmente denominada popularidad es del 50%. ¿Le importará a Mujica? Según informó el diario Últimas Noticias, el muy popular aunque polémico José Mujica sorprendió a todos con un nivel de aprobación a su gestión del 74%, con un muy exiguo nivel de desaprobación del 4% y otro 15% que dice ni aprobar, ni desaprobar su gestión en sus primeros 100 días de gobierno. Pero poco tiempo después, en agosto, la popularidad de Mujica ya había bajado al 65%, mientras que la desaprobación trepaba al 15%.
Sin embargo, el nivel de aprobación sigue en caída libre y al cumplirse nueve meses del gobierno de Mujica, según la última encuesta de Interconsult, se ubica en el 50%. Si bien en marzo sólo el 4% mantenía distancias con Mujica y en agosto ese porcentaje había subido al 11%, hoy se ubica en un 13%, mientras que la cuarta parte de los entrevistados ni aprueba, ni desaprueba la gestión.
Ratifican tono confrontativo
El Partido Comunista cerró su congreso nacional ratificando su tono confrontativo. Los comunistas cerraron con una declaración donde reiteran el concepto de “gobierno en disputa” y llaman al “aislamiento del bloque de poder”.
“Afirmamos que el país está en disputa entre el programa popular y los intereses de las clases dominantes que buscan mantener y extender sus privilegios y en ese contexto también nuestro gobierno está en disputa”, señalan los comunistas en la declaración emitida al final del congreso. Protestaron por las “andanadas mediáticas contra la clase obrera y su partido”, aseguraron que no están “en la vereda de enfrente”, y plantearon su objetivo: “Avanzar en el desplazamiento del bloque de poder, sustituyéndolo por la clase obrera y sus aliados. Es una nueva hegemonía en el plano nacional y puede potenciarse en el marco de los procesos que se viven en América Latina”.
“Pie en el acelerador”
En el congreso, el dirigente Victorio Casartelli resultó el más votado, seguido por la intendenta de Montevideo, Ana Olivera, y el dirigente del Pit-Cnt, Juan Castillo. Casartelli dijo que desde el partido se le pide al gobierno que ponga el “pie en el acelerador” para hacer un “reparto” más equitativo y rápido. “No es crimen pedir que se aceleren más los cambios que están propuestos por la propia línea programática del Frente Amplio. Hacemos críticas no inventando, sino haciendo nuestras las aspiraciones planteadas en el programa del Frente Amplio”, argumentó a radio Sarandí.
Elogió los indicadores económicos pero indicó que esos beneficios deben trasladarse con mayor rapidez a los sectores de la población más sumergidos: “No hablamos como antes de hacer crecer la torta y después repartirla. La torta ya es grande y hay que repartirla, darle un poco a cada uno. A infraestructura, a las mejoras generales. Creemos que hay que poner el pie en el acelerador para avanzar en la línea fundamental que planteó el Frente Amplio que es país productivo con justicia social”.
Lealtad, unidad y corrección
Pero no todos los sectores frenteamplistas piensan igual que los comunistas. Varios dirgentes participaron de un acto de apoyo a la gestión de Mujica organizado por las Redes Frenteamplistas. En ese acto, la senadora Lucía Topolansky reclamó “lealtad”. Consigna La República que frente a las canteras del Parque Rodó, ante jóvenes que se autoconvocaron para defender al gobierno, Topolansky dijo que “está muy bien que algunos grupos tengan metas más largas, pero no son las del Frente Amplio, son posteriores”. Las Redes Frenteamplistas llamaron a corregir los errores, tanto en la fuerza política como en el gobierno. Pero también reclamaron unidad en su proclama: “Nos necesitamos todos para seguir cambiando”. El acto fue calificado como “oficialista: de reafirmación del gobierno popular que peleamos como locos para tener”.
A la papelera
El presidente José Mujica dijo que el día que reciba un proyecto sobre una ley de medios, la tirará a la papelera. “¡Me tienen podrido con esa pregunta acerca de la ley de medios! ¡Podrido! Al presidente de la República no le llegó absolutamente nada. El día que le llegue ya ha dicho que va a tirarla a la papelera”, dijo en una entrevista con el diario argentino La Nación.
Según dijo, el tema de la regulación de medios no es un tema de preocupación para su gobierno. “Lo que me preocupa es que los medios de Uruguay queden en manos de alguna multinacional de afuera. Seguramente, tenemos problemas en nuestro espacio nacional, pero hay que separar la paja del trigo. Si en Uruguay los manejadores de la noticia internacional tienen la intención de dominar nuestro espacio, mientras yo esté de presidente, les va a costar un poco”, añadió.