Paysandú, Jueves 16 de Diciembre de 2010
Rurales | 11 Dic Están previstas para las próximas horas precipitaciones que serían de tremenda trascendencia para al menos mitigar la sequía que se ha instalado en prácticamente todo el país. Las mismas se extenderían hasta últimas horas del sábado, abarcando buena parte del país.
Según los pronósticos, los registros más importantes serían en el Norte, donde podrían caer unos 40 milímetros, en tanto que en el Sur no serían de mucho más de 10.
Los primeros pronósticos para la semana siguiente (del 17 al 25 de diciembre) dan cuenta de volúmenes de relativa significación, que podrían acumular más de 100 milímetros en algunas regiones del Norte y del Noreste. De confirmarse, sería una excelente noticia para el final del año.
De todas maneras, vale la pena aclarar que desde el punto de vista de las expectativas los pronósticos habitualmente dan agua, pero luego la tormenta se disipa sin que prácticamente haya llovido.
Ahora están pasando las dos cosas: los pronósticos en general no dan lluvias y cuando las dan, la realidad suele distar de lo que se esperaba.
Allí sí, se instala un proceso de sequía intenso, como el actual, máxime cuando los calores son tan agobiantes como los de estos últimos días. Ahora todas las expectativas están puestas en los pronósticos de lluvias para este sábado. En horas se sabrá si fue suficiente para moderar la actual situación.
Hay zonas del país donde las “reservas” de agua en el suelo eran importantes gracias al “verano regado” de este año y por lo tanto la situación forrajera no es tan preocupante. Pero hay otras en las que la situación se agrava día a día. “No se podrá decir que no avisamos”, dirá el ministro Aguerre, quien desde el Congreso de la Federación Rural realizado en la Exposición Feria de Paysandú a fines de mayo viene advirtiendo sobre la posibilidad de que este verano sea más seco de lo normal.
A esta altura no es mucho lo que se puede hacer, más allá de aliviar los campos, sostiene un informe de Negocios Ganaderos. Lógicamente, la consecuencia inmediata de esta masiva decisión es una baja en los precios de la hacienda, tanto de la reposición como del gordo. Eso es lo que se advierte claramente en estas dos últimas semanas. Como quien agrega leña al fuego, la decisión del ministro de suspender las exportaciones en pie a Turquía juegan en el mismo sentido.
Ambas situaciones se potencian para determinar una fuerte corrección a la baja en los precios. Para el novillo gordo es sumamente difícil llegar a U$S 3 el kilo en segunda balanza, con la mayoría de las plantas manejando cotizaciones de entre U$S 2,90 y U$S 2,95. Los resultados de los últimos remates por pantalla dan cuenta de una corrección muy significativa en los precios de referencias de las restantes categorías.
Y el verano recién está empezando. Si esto sigue así, enero será cruel. El alivio recién estaría llegando para marzo o abril, para cuando se supone se estará normalizando la temperatura del océano Pacífico y entonces La Niña dejará lugar a un tiempo de neutralidad que debería significar lluvias normales para el país. Pero queda mucho por recorrer todavía para llegar al otoño.
Nuevas medidas
El próximo lunes el gobierno piensa anunciar un paquete de nuevas medidas para paliar los efectos de la sequía. Las mismas pasarían por acceso al agua, a forrajes y/o raciones fuera de los predios, para darle de comer al ganado.
El subsecretario del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, ingeniero agrónomo Daniel Garín, confirmó a El País que el gobierno tiene definido un paquete de nuevas medidas para paliar los efectos de la sequía, pero sostuvo que “serán lanzadas la semana que viene”, luego de medirse los efectos de las precipitaciones anunciadas y ver si finalmente los pronósticos se llegan a concretar.
Adelantó que las iniciativas oficiales pasarán por “facilitar el acceso al agua y a la comida extrapredial (raciones o forrajes para el ganado). A través de esto girará el paquete”. El jerarca no quiso profundizar en las iniciativas, explicando que primero se esperará a ver el efecto de las lluvias anunciadas, porque puede haber modificaciones.
Según Garín, los nuevos anuncios abarcarán y beneficiarán a todos los productores, pero explicó que hay disparidad de situaciones según las zonas del país a ser analizadas, no descartándose medidas más profundas en los lugares más problemáticos.
“Esperamos que los productores queden contentos porque llovió y no sólo porque el gobierno anunció más medidas”, admitió el jerarca del MGAP.
La zona más comprometida es el litoral Norte del país --básicamente Artigas y Salto-- donde el forraje de los campos está perdiendo calidad y baja el caudal de agua en los predios.
Aún no hay ganado pastoreando en la calle, no hubo mortandad de animales ni se han secado aguadas permanentes, pero está bajando el caudal de agua y si se mantiene seco, comenzarán los problemas.
La idea del MGAP apunta a prevenir antes de que el ganado, que todavía tiene un buen estado corporal, comience a perder kilos. El déficit hídrico provocó que se dejaran de plantar las sojas de segunda y en los tambos baja la comida.
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