Paysandú, Miércoles 22 de Diciembre de 2010
Locales | 15 Dic En la víspera se inició una nueva etapa en la experiencia piloto que busca darle a los pescadores artesanales una herramienta alternativa para la pesca en época de veda en los cursos de agua naturales.
En un estanque construido en Corrales del Abasto se procedió a la suelta de mil alevines de bagre negro, en el marco del proyecto “Manejo Sustentable de la Pesca Artesanal en las costas del departamento de Paysandú” que lleva adelante un grupo de pescadores artesanales de Paysandú, la Agencia de Desarrollo Productivo del CES y la Intendencia Departamental de Paysandú.
El proyecto es original de la anterior Administración municipal “pero por distintos motivos estaba un poco frenada, por eso cuando asumimos pensamos retomarlo”, según dijo el director de Desarrollo Rural de la Intendencia de Paysandú, Gustavo Silva.
Explicó que se realizaron algunos encuentros con el ingeniero Rómulo César, tras las cuales “decidimos reflotarlo y seguir adelante”.
El estanque en Corrales del Abasto “ya estaba hecho, como contrapartida de la Intendencia, y ahora cumplimos con la primera etapa de siembra de alevines. Esto es un plan piloto para que los pescadores artesanales tengan un modo de sustentación entre los meses de octubre a febrero, que es cuando está la veda del río Uruguay”.
El ingeniero agrónomo Rómulo César, técnico del proyecto, destacó que la Agencia de Desarrollo es una de las instituciones que integra la ejecución del mismo, la cual tiene un rol activo. “El Proyecto tiene además un componente que es lo social, que tiene que ver con facilitar o trabajar en el proceso de conformación de los pescadores como grupo organizado. En ese sentido, es que se tienen previstas instancias de fortalecimiento grupal y capacitación”, dijo.
En la suelta de crías de bagre negro, traídos de la Estación de Piscicultura de Villa Constitución, Salto, perteneciente a la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara), primero se aclimató a los alevines a la temperatura del estanque. “Primero se aclimató la temperatura del agua de la bolsa en la cual fueron trasladados con la del estanque.
Luego abrimos las bolsas y se comenzó a cargar agua del estanque en las mismas e hicimos el cambio de agua hasta que los alevines se aclimataron para luego largarlos”, explicó el médico veterinario Marcel Rodríguez.
A su vez, el veterinario manifestó que luego de esta instancia los alevines se deberán alimentar dos veces por día, “tenemos que fertilizar un poco más el estanque, ya que la calidad del agua no es la óptima pero lo vamos a ir mejorando, necesitamos un agua un poco más verde, es decir que hay que generar microorganismos que ayuden en la alimentación de los peces”.
Al proceder de esa manera, se podrá “mejorar el hábitat a los peces, no solo desde el punto de vista alimenticio sino también sanitario, impidiendo que aparezcan distintas patologías. Habrá que hacer un plan de racionamiento, observando la evolución de los peces y aumentando así la ración”, dijo Rodríguez.
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