Policiales | 02 Ene Diagnosticaron muerte cerebral a la niña de 5 años que el pasado miércoles 23 fuera atropellada por un taxi conducido por una mujer, en Independencia y Benito Chaín. El accidente, del que no se informó oficialmente, conmocionó a los vecinos del barrio Municipales II y sigue generando dolor a familiares y amigos de la pequeña Ayelén Picart, quien permanece internada en el CTI del Hospital de Salto.
EL TELEGRAFO accedió al desgarrador relato del padre de la niña, así como a detalles del asesoramiento que un estudio jurídico de la capital brinda a los familiares de la pequeña. El matrimonio Picart expresó su indignación por cómo fue el trágico accidente, por el comportamiento de la conductora y porque no ven respuestas claras de la Policía.
Información extraoficial indica que el accidente ocurrió en la tarde del pasado miércoles 23, cuando la pequeña Ayelén se dirigía al almacén ubicado frente a su casa, acompañada por su hermana mayor, de 12 años. Al parecer, las niñas cruzaban la calle tomadas de la mano --a unos veinte metros del cruce de Benito Chaín e Independencia-- cuando un taxi Fiat Uno, matrícula ITX 1133, conducido por una mujer de iniciales D.B.S y perteneciente a una empresa de remises (que de acuerdo a testigos se desplazaba a gran velocidad) eludió un ómnibus del servicio urbano que estaba estacionado en la esquina, y al proseguir la marcha embistió a la pequeña. El brutal impacto arrojó a la niña a unos veinte metros, en tanto testigos habrían declarado que en primera instancia la taxista no se detuvo y fue interceptada a unos 30 metros por vecinos que vieron el accidente.
Ante la gravedad de las lesiones experimentadas por la menor, varios vecinos ayudaron a levantarla de la calzada, tras lo cual fue trasladada al Hospital Escuela del Litoral por la propia taxista y otras personas. Allí le diagnosticaron politraumatizada grave, pasando al CTI. A pocos minutos de ingresar, sufrió una complicación que obligó a los médicos a extraerle el bazo y luego fue derivada al CTI pediátrico del Hospital de Salto.
“La dejó tirada como
si hubiera agarrado
a un perro”
El jueves EL TELEGRAFO dialogó con el papá de Ayelén, Juan Ramón Picart, quien expresó su impotencia por lo sucedido.
“Estamos totalmente indignados. Hay que ver a mi angelito como la dejó esta mujer. No quisiera que alguien sufriera como nosotros lo estamos haciendo. Hace nueve días que estoy acá sin moverme de al lado de mi ángel, no sabés cómo está deshecha. Tiene 27 fracturas en el cuerpito, le extirparon el bazo, tiene un trauma cerebral que no sabemos si va a salir, relató en desgarrador testimonio.
“Ni siquiera ha llamado para preguntar cómo está mi beba, la dejó tirada como si hubiera agarrado a un perro, o peor, porque si uno pasa por arriba a un animal creo que por corazón lo levanta. No hemos recibido ni un llamado de la familia, no para que nos den algo, porque eso no nos interesa, sino por interesarse. Es algo horrible, un accidente le puede pasar a cualquiera pero es una nena, si la vieras como está. Entrás a la sala y se te cae el alma, cualquiera que fuera padre no podría pasar por esta situación. Mi hija tiene moretones sobre moretones, de la punta del pie a la cabeza, es algo increíble, se ve que esta mujer nunca atinó a frenar. Porque no puede estar tan lastimada por un simple accidente”, agregó, totalmente quebrado.
“Desconocemos cómo fue el momento del accidente, pero algunos vecinos nos dijeron que esta conductora venía a muy alta velocidad y que por querer esquivar un ómnibus chocó a Ayelén. Según tengo entendido esta señora tendría problemas visuales, no sería la primera vez que protagoniza accidentes de tránsito y aparentemente estaría inhabilitada para conducir. La otra hermanita no sufrió lesiones pero está pasando por un gran trauma emocional, porque lamentablemente vio todo”, puntualizó.
“Desde el momento en que esta desgracia le pasó a mi angelito estamos con ella. Cuando ingresó a CTI del Hospital Escuela del Litoral le extirparon el bazo, y había que trasladarla a Tacuarembó o Montevideo, pero los médicos dijeron que no iba a aguantar el viaje, así que nos vinimos para Salto”, dijo Juan Ramón.
INDIGNACIÓN
La familia Picart vive días de intenso dolor por lo sucedido, pero --según relataron-- también sienten indignación por el ineficaz accionar policial, aunque admiten no entender cómo se manejan estas situaciones.
“Nos llama poderosamente la atención que fui a la Jefatura a preguntar cómo quedaba caratulado este hecho y me dijeron que no había (registro), cuando sabemos que en la Seccional Segunda está registrado el accidente”, dijo Karina, mamá de la niña.
Por su parte, consultado el asesor legal del matrimonio, Nelson Mederos (quien trabaja para un estudio de Montevideo), dijo que están al tanto de todo lo sucedido y analizarán las medidas a tomar.
“Lo que nos llama mucho la atención es que a un accidente tan grave como éste no haya ido Policía Técnica, aun cuando se haya retirado el vehículo igual tendrían que haber estado. Además no se recabó información a los testigos. Tengo entendido que los policías fueron directamente al Hospital, de acuerdo a lo que me cuentan los padres”, agregó.
“Yo les explicaba a los papás que, lamentablemente, en casi un 98 % de los casos la otra parte involucrada no llama para preguntar el estado (del herido) o muestra interés en saber cómo está. También --hay que decirlo-- la preferencia a la altura que cruza la nena es del vehículo, yo creo que por eso el juez no se expidió al respecto ni elevó antecedentes. Si bien el auto embistió a la niña, la que salió y cruzó la calle es la pequeña”, explicó Mederos.
Horas difíciles
En el momento en que obteníamos el testimonio de los padres de la pequeña, un aire esperanzador les llenaba momentáneamente el corazón, ya que a Ayelén le habían retirado la medicación y --cuando conversábamos con su mamá-- nos emocionamos junto a ella al enterarnos de que ya movía uno de sus pies.
Tras casi 24 horas sin medicación, un nuevo llamado de su madre nos informó que tras realizarse un test clínico, el desalentador diagnóstico fue que Ayelén sufre muerte cerebral. Las próximas horas serán decisivas para la niña y sus familiares, quienes solicitaron a los sanduceros “que recen mucho por nuestro ángel”.