José María Paredes

Deportes | 03 Ene Sin dudas que está considerado como uno de los mejores arqueros del fútbol de Paysandú, pero que también dejó su sello en la capital de la república, a nivel profesional defendiendo a Defensor de aquellos años, en la cual fueron destacadas sus actuaciones por los medios capitalinos de entonces.
Con José María Paredes, recordamos aquellos años de gloria futbolística en lo personal, pero que antes de llegar al arco, tiene una historia como delantero y defensa, y decía que “comencé jugando de “9” y de zaguero central, en la reserva de Progreso, por allá por el año 50 y pico y un día faltó el arquero y me ofrecí para jugar de arquero pese a que apenas llegaba a tocar el travesaño, porque era más ancho que alto y me contestaron, “no negro y quién hace goles” y les contesté, que me importa, si mientras no nos hagan goles si soy un gran atajador y a partir de ahí 30 años de arquero”.
Nos cuenta que “debuté con 13 años con incursiones en la selección de la B (ahora Unica Divisional de Ascenso) y de la selección mayor de Paysandú, con otro fenómeno que era el “gringo” Dotti, que era el otro arquero”.
En la selección de Paysandú, con varios títulos en su haber, nos expresó que “se me borraron, tengo algunos por ahí, pero el de los más importante fue en el 65’ que veníamos desde del 59’ sin ganar nada, que cuando queríamos llegar a ser campeones, no se que pasaba y quedábamos ahí, pero en el 65’ cuando vino Waldemar Bentancourt a dirigir a la selección de Paysandú, se montó un equipo tremendo, como hasta pasado los 70’”.
Luego de comenzar a revivir jugadores de aquellas épocas, largó “jugadores de primera línea, con tres arqueros, Alvarez, Eduardo Romero y yo, y salimos campeones en la cual le hicimos 10 goles a Colonia y 5 a Salto en Salto”, agregando “jugábamos yo, Lanterna, Migliónico, otro gran jugador y compañero que se fue antes que nosotros, Schubert Ferreira, la “Chita” Arcel, Jorge Laclau, Miguel Salvatierra y Juan Flores, Jorge Arcel, zurdo y puntero derecho, “Barroco” Rey y Jorge Navadian, también otro que se fue primero que nosotros, el “Oso” Heriberto Sosa, también Alfonso Lodeiro, realmente un montón de jugadores surgieron por aquellos tiempo, que prácticamente entraban a la cancha y jugaban solos”.
Recordó que en la selección de Paysandú estuvo desde 59’ al 65’, del 68’, 72’ y por último en el 75’, no jugando en el 69’ porque se fue a jugar a Huracán de Tacuarembó y desistió jugar por la selección mediterránea, porque “camiseta de dos colores no conocía, porque yo vestía la blanca y nada más”.
También recordó al título Sudamericano que lograron, “con un grupo excepcional de jugadores, jugamos acá con Paraguay, con Chile en Salto y la final contra Bahía Blanca que representaba a Argentina, a la cual le ganamos 4 a 1 y en ese partido atajé un penal”.
Luego de una pequeña pausa dijo, “el otro arquero que era otro de los grandes del Litoral, Bourdín, un gran compañero y un amigo de primera”.
Con respecto a su pasaje por Defensor, manifestó, “había ido, pero me rompí un dedo y dije que no iba nunca más, pero me encontré en Montevideo con un grande del deporte, Juan Felipe Márquez, y me dijo “Paredes cómo lo precisamos” y le contesté, ¿adónde? y me respondió “en Defensor, mire que somos tan amigo y cambiamos de técnico, ¿porque no va mañana que hacemos fútbol con River?
“Al otro día fuí y me presentaron al técnico que era Alejandro Morales, el preparador físico Julio Giossia, un gran preparador físico, y bueno debuté contra Wanderers y le ganamos 1 a 0, jugué ocho partidos, con siete sin que nos hicieran goles y Defensor que estaba a 15 puntos de Wanderers, salvamos el decenso, que el único equipo que nos hizo goles fue Cerro, cuatro, pero tuve la satisfacción de ser en todos los partidos el mejor de la cancha”.
Ahora a los 71 años, próximo a su onmástico el 6 del presente, entrena los arqueros como si tuviera sus jóvenes inicio y con su pierna derecha que será operada el 22, luego de tres años de espera.