Locales | 07 Ene En el primer año el Presupuesto Quinquenal prevé un monto global del orden de los 54 millones de dólares (mil 83 millones 849.312 pesos), que en los sucesivos años se irá incrementando en base al IPC, anunció a EL TELEGRAFO el director general del Departamento de Administración, Heber Coello.
El jerarca destacó que tras un intenso trabajo desarrollado en los últimos meses se plasmó este esquema de trabajo municipal que contempla globalmente una afectación del 48 por ciento a remuneraciones personales y un 30 por ciento a inversiones, así como un 19 por ciento para funcionamiento y un 3 por ciento para la Junta Departamental. Asimismo representa un aumento en moneda corriente de un 47 por ciento respecto al último año de la Administración Pintos.
Al exponer los alcances de este presupuesto, observó Coello que “este viernes vence el plazo para la entrega a la Junta Departamental, y está integrado por las previsiones del gobierno departamental, que incluye el presupuesto de la Junta Departamental, y una experiencia que va a significar un aprendizaje para todo el mundo al incluirse por primera vez el presupuesto de los municipios creados en el departamento, que son Guichón, Porvenir y Quebracho”.
Explicó el jerarca que en lo que refiere a ingresos, “consideramos como un recurso departamental aquellos que están establecidos por la Constitución, porque el artículo 297 de la Constitución los establece como Rentas Generales, que es el porcentaje de participación que las intendencias tienen en el presupuesto nacional”.
“Por lo tanto, considerando lo que recauda directamente la Intendencia, más lo que se genera a través del gobierno nacional con destino departamental, el presupuesto tiene un 92 por ciento de recursos genuinos y un 8 por ciento de menor incidencia. Ese 92 por ciento está compuesto a su vez por un 57 por ciento de ingresos que directamente recauda la Intendencia, un 30 por ciento que son los que corresponden a lo dispuesto por el artículo 214 de la Constitución, y por un cinco por ciento del Fondo de Desarrollo del Interior”, explicó Coello.
Relación “razonable”
en el gasto
En lo que refiere a la distribución del gasto “también hemos tratado de ser lo más razonables posible, en el entendido de que para que un presupuesto realmente pueda ser operativo tiene que tener una relación razonable en sus diferentes rubros”, indicó, para señalar que “el 48 por ciento del presupuesto está destinado a retribuciones personales, cargas legales y servicios por los beneficios sociales; el 30 por ciento se va a inversiones que se van a ejecutar a través de los respectivos departamentos, los municipios, las juntas locales, etcétera, y el 22 restante está compuesto por un tres por ciento que corresponde a la Junta Departamental y el resto por gastos de funcionamiento en los que está incluido lo previsto para el Presupuesto Participativo”. “Esto hace que a nuestro juicio tengamos un presupuesto que es coherente entre lo que son recursos que corresponden directamente al presupuesto departamental y la distribución de los gastos, lo que hace que sean indicadores de gestión que aseguren por lo menos en principio una visión razonable de la distribución del presupuesto”, dijo.
Analizando datos, surge que “el primer presupuesto de la Administración Pintos, el presupuesto 2006, fue un 73 por ciento mayor sobre el último de la Administración Lamas, es decir el 2005. A la vez el presupuesto del primer año de la Administración Bentos, es decir el 2011, es sobre el último presupuesto de la Administración Pintos, el 2010, un 47 por ciento mayor. En este último caso, el que estamos enviando tiene ajustes de tributos por variación de IPC, pero en realidad no tiene incrementos de la base contributiva de tributos, salvo una pequeña modificación que se hace en materia de franjas de Contribución Inmobiliaria Urbana, donde no se cambia el valor imponible del tributo sino que se modifica la distribución de las franjas”.
“Con ello se busca una más razonable distribución, favoreciendo a los sectores de menor poder contributivo y el resto se hace por variación de IPC, en tanto la Administración que empezó en 2006 tuvo un incremento muy superior al monto que venía de la Administración anterior”, estimó el jerarca.