Rurales | 18 Ene Con un encuentro con productores celebrado el martes en la sede de la Asociación Agropecuaria de Artigas, la regional Litoral Norte del Plan Agropecuario inició una serie de actividades destinadas a promover las herramientas que se consideran más efectivas para enfrentar la sequía.
Estas acciones están en parte asociadas al programa que impulsa el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca para tratar de minimizar los efectos negativos de la seca. El técnico de la Regional, ingeniero agrónomo Esteban Montes, indicó que el objetivo de la propuesta es brindar a los criadores una orientación con el fin de sacar el mejor provecho de las inversiones, encarando el suministro de raciones.
El profesional consideró que el mayor problema radica en la disponibilidad de agua para consumo de los animales. “Las aguadas están bastante complicadas”, expresó, señalando que en materia forrajera los campos naturales superficiales que ya al principio de la primavera estuvieron bastante secos, luego reverdecieron y ahora nuevamente están perdiendo calidad. En los casos de suelos más profundos la situación es mejor, manteniéndose áreas verdes en las zonas donde hubo mayor humedad.
Al confirmar lo que los productores advierten en sus propios campos, esta dependencia del Plan Agropecuario comprobó que durante el período de julio a diciembre se verificó una producción de forraje inferior al comportamiento de los últimos nueve años. “Pero todavía el ganado se mantiene bastante bien”, indicó Montes, siendo la categoría de los vientres con cría la “más sufrida”.
Como las consecuencias de la seca anterior aún están presentes, en general los campos estaban bastante livianos, por lo que las haciendas resistieron mejor, indicó el técnico del Plan a Negocios Ganaderos. Además, el fenómeno comenzó a instalarse en un momento de buenos valores, lo cual facilitó a los productores desprenderse de algunas categorías para privilegiar otras.
En el intercambio con los productores, los técnicos del Plan tratarán de “focalizar bien la herramienta” del destete precoz. A título de ejemplo, Montes indicó que en el caso de las vacas de primera cría hay que destetar tempranamente “sí o sí”. También aconsejarán hacerlo en el caso de las vacas de última cría, porque destetando ahora aún hay tiempo para venderla gorda al comienzo del verano. Si a estas vacas se las desteta entre abril y mayo serán un problema durante el invierno, el cual probablemente presentará muchas restricciones.
Para las categorías de cría que están entre ambas puntas se sugerirá realizar una ecografía ovárica para determinar fehacientemente su condición, porque en estos momentos la condición corporal no es un fiel indicador de su comportamiento reproductivo, estableció Montes, al coincidir con lo que han advertido desde comienzos de la primavera los técnicos privados en el transcurso de los programas de inseminación, aún en el caso de vaquillonas que visualmente se apreciaban en buen estado.