Nacionales | 02 Feb Presión frenteamplista
Existen sectores frenteamplistas que quieren cambios tributarios para mejorar la redistribución de la riqueza y ejercen presión para que los sectores altos hagan “un esfuercito más”. Los sectores que apoyaron a José Mujica en la interna quieren más tributos, pero los “astoristas” rechazan la idea.
Informa El País que en el Partido Socialista surgieron voces pidiendo más presión impositiva para los que se llevaron “la tajada mayor” del crecimiento económico y se propuso una alternativa a la intención del gobierno de bajar el IVA. El Partido Comunista en tanto, reclamó mayor presión tributaria sobre las empresas, mientras que desde la Vertiente Artiguista piden una ronda de contactos con el equipo económico y quieren gravar más a las franjas más altas del IRPF, entre otras alternativas.
Los socialistas proponen sumar nuevos productos a la canasta que hoy paga sólo 10% de IVA por ser considerados de alta necesidad. “Debemos incorporar más artículos a los que pagan hoy 10% y que son de consumo generalizado. Hay que elevar la mirada y ver que hay sectores que perciben 12.000, 15.000 o 20.000 pesos y que apenas les da”, dijo el dirigente José Luis Blasina. También apuntan a elevar el monto mínimo no imponible del IRPF y al mismo tiempo subir lo que aportan por ese tributo las franjas más altas de la sociedad y aumentar el Impuesto al Patrimonio.
Desde la Vertiente Artiguista, el senador Enrique Rubio dijo al matutino que el equipo económico debe iniciar intercambios y contactos con los demás sectores frenteamplistas para discutir los “instrumentos” a aplicar. Recordó que a mediados del año pasado reclamó revisar el compromiso de bajar dos puntos el IVA. El legislador plantea diversas alternativas a estudiar, entre ellas que el IRPF “reciba una recaudación más importante de los sectores de altos ingresos, levantar el mínimo no imponible y direccionar la disminución del IVA para que llegue a sectores de menores ingresos”. Pero aclaró: “No estoy para polarizaciones (con el equipo económico), pero sí para avanzar en el fondo del tema: la desigualdad en la distribución del ingreso”.
Por otro lado está el bloque Frente Líber Seregni, que integran Asamblea Uruguay, Nuevo Espacio y Alianza Progresista. “Bienvenidos los aportes, pero no quitemos esos pilares básicos de la economía que la izquierda le dio: política económica de certezas, sostenida en el tiempo y con prosperidad”, afirmó el senador Rafael Michelini. Aunque está de acuerdo en intentar “achicar la brecha”, plantea como cambios “seguir bajando el IVA, sacar impuestos al trabajo a través de la reducción de los aportes patronales e ir desgravando a los sectores de sueldos más bajos que todavía grava el IRPF”.
No debatir por la prensa
Y siguiendo con el debate interno, el presidente José Mujica quiere que los trapitos no se saquen al sol. Reclamó “responsabilidad política” y pidió que las situaciones que atraviesan la izquierda y el gobierno sean debatidas en la interna y no a través de la prensa.
Según informaron a Últimas Noticias fuentes oficiales, durante el Consejo de Ministros realizado el lunes, Mujica dijo a su gabinete que los numerosos comentarios efectuados en relación a las diferencias en el gobierno derivaron en críticas al senador Ernesto Agazzi a través de la columna “Bitácora” en el portal Montevideo.com. En la columna se aludió a la “carencia de criterio” de Agazzi ante la sequía y se lo acusó de participar en “intrigas” junto al subsecretario Daniel Garín para “derrumbar” al ministro Tabaré Aguerre y lograr un “doblete del MPP” en la cartera --Garín pertenece al MPP mientras que Aguerre es independiente--. Las apreciaciones de la columna molestaron a Mujica, quien destacó el “bajo perfil” de Agazzi y enfatizó que “nunca pidió nada”, al punto que “se resistió a ocupar cargos en el gobierno y hubo que convencerlo para que fuera en la lista al Senado”. Antes de nombrar a Ricardo Ehrlich al frente de Educación, Mujica ofreció el cargo a Agazzi, quien lo rechazó. “Es un ejemplo de generosidad, una persona que no antepone sus intereses personales”, dijo Mujica, quien considera que las críticas fueron consecuencia del manejo público de las diferencias en el gobierno, por lo que pidió discreción y responsabilidad en el futuro.
Perfilismos dañinos
Los dimes y diretes continúan dentro de Unidad Nacional. Ahora el senador herrerista Gustavo Penadés dijo que el sector encabezado por el ex presidente Luis Alberto Lacalle debe liderar la acción parlamentaria del Partido Nacional y para eso está obligado a terminar “con un incipiente perfilismo que le puede hacer mucho daño al sector”. Penadés explicó a El País que en la UNA no deben “reprimir” posiciones, sino “llevar adelante una discusión interna para lograr coherencia política y programática y liderar desde el partido a toda la oposición”. “Hay que evitar diferencias en el Parlamento que puedan deteriorar el relacionamiento interno”, añadió. Según Penadés, la reunión en Rocha consolidó a la UNA como proyecto político que debe “administrar” a todo el partido, “ya que hasta ahora era solo un acuerdo electoral”.