OPINIONES

Locales | 06 Feb “Me conformo con
una simple disculpa”
Quienes tenemos que hacernos cargo de una denuncia informal de un Sr. de nombre Marcelo Tortorella (Director de Turismo de la ciudad vecina de Paysandú), hacemos lugar al derecho de réplica que nos asiste y que tan cordialmente los directivos de EL TELEGRAFO han puesto a nuestra disposición y mucho agradecemos.
Yo, Pedro Bel, como responsable absoluto del proyecto turístico de Isla Caridad (2000-2022), quiero en esta oportunidad y luego de haber dejado pasar un tiempo prudencial a la espera de una rectificación de su parte, ya que sus propios compatriotas se sintieron tocados y ofendidos con sus dañinas y mentirosas declaraciones y salieron por este medio y otros orales de su ciudad, en defensa de lo que sucede en Isla Caridad y que Ud desconoce y trata con total liviandad y desparpajo.
Quiero informarle fehacientemente para que no siga cometiendo errores por desconocimiento teniendo en cuenta que es Ud. un funcionario público, lo que tendría que hacerlo un hombre más informado, responsable y prudente.
Su desconocimiento es tan profundo, que fue a hablar con el Sr. Hugo Marsó, alguien que nada tiene que ver con Caridad, ya que ésta no pertenece a su Jurisdicción sino, a San Anselmo. ¡Claro!, Marsó por cortesía lo ha escuchado y hasta no pongo duda sus dichos que lo tendría en cuenta, ya que Colón es la capital del turismo entrerriano. Y si hay algo que tenemos los colonenses como primera regla de más de medio siglo como líderes del turismo, es... ser amables y cordiales.
Aclarado esto, lo invito a lo nuestro.
Primero: yo, Pedro Bel en forma personal, no solo en temporada sino los 365 días del año, me encargo desde horas muy tempranas y hasta casi el mediodía y luego a la tarde, de la limpieza total y el repaso de las playas de Isla Caridad, cuidando nada más y nada menos, que la salud de sus compatriotas, juntando profilácticos, jeringas, latas, botellas, vidrios rotos en la arena, o como el sábado 29/01, del agua, siendo aproximadamente las 18 horas y donde muchos fueron testigos del trabajo minucioso que realizamos para recuperar pedazos de 2 botellas de cerveza que dos jovencitos, irresponsables e inconscientemente, molieron a unos 10 metros aproximadamente de la orilla; bolsas, botellas plásticas y mucha otra basura que nos toca juntar en cantidades industriales y que en gran proporción viajan por el río desde su costa con el viento que prevalece en este sector del río y que la deposita en la isla (si Ud cuidara la higiene de su gente, como primera medida limpiaría sus costas como yo limpio la isla).
Hasta ahora nunca me quejé, Ud lo sabe, por dos motivos de sentido común: una, me dedico a mi casa sin rezongar del vecino y otra, que no me asusta, es esfuerzo, yo trabajo en beneficio de mi prójimo y el mío propio.
Segundo: más allá de eso (que es bastante), la isla pone a disposición cancha de voley, parador con refrescos (a pérdida), parrilleros, camping, carpas, sombrillas, mesas, sillas, cargador de baterías, baterías de auxilio, nafta, botiquín, enfermera, vigilancia, embarcación de rescate y remolque, agua caliente gratuita, etcétera, etcétera. Todo esto le brindamos a los casi 500 socios que luego de 10 años de perseverancia y trabajo honesto se ha logrado en Isla Caridad.
Todo esto que nosotros llamamos servicios (aunque Ud. tenga otro concepto de lo que es servicios por lo expuesto en su nota de EL TELEGRAFO), ¿dónde estaba Ud. cuando las últimas tormentas sorpresivas tomaron desprevenido a más de un navegante? ¿Nosotros?, trabajando duro, no permitiendo bajo ningún concepto que abandonaran la isla y salieran aguas afuera con las consecuencias impredecibles que eso podía acarrear a vidas y bienes.
A los chicos les proporcionamos carpas ya que se encontraban con frío, mojados y asustados. Se prendieron dos enormes fogones para que mayores y menores estuvieran contenidos y tibios más allá que estaban todos invitados a mi casa personal a cenar si la situación no cambiaba.
Usted: ¿llamó como funcionario a prefectura para tener conocimiento de la posición, estado sanitario y suerte de sus compatriotas, que no habían dado entrada a puerto? ¡Seguro que no! Total Pedro Bel en vez de estar en su casa disfrutando de la tibieza del hogar, mateando con tortas fritas, andaba mojado cortando leña, protegiendo la salud y la vida de sus compatriotas.
Sinceramente Sr. Marcelo Tortorella, si Ud no entiende esto por servicio y dedicación y calidez humana, permítame sugerirle con todo respeto, renuncie a un área tan sensible como es una dirección de turismo. No solo por el intendente Bentos que intenta con gran esfuerzo una ciudad distinta y sustentable (según he podido recabar por ser un comunicador social dedicado a los medios de prensa en mi país), sino también hágalo por respeto a ese pueblo maravilloso al que tanto quiero y respeto por ser la digna y heroica Paysandú, llena de historia y hombres probos y de la que me considero un pedazo ya que mi amada abuela doña María Elena Morales Linares, era sanducera.
Y un pueblo con tanta dignidad, no merece funcionarios demagogos, sino hombres que dediquen su tiempo a sus energías a solucionar las necesidades de su casa, antes que las del vecino, más si ese vecino ni siquiera es parte de su país.
Una cosa más; turismo es también seguridad (casi primordial) y le informo porque seguro también lo desconoce que mientras muchos vienen a disfrutar de la isla en la costa de su país, le rompen los cristales o cerraduras de los vehículos para robar sus estéreos, carteras, etc, etc. En la isla dejan sus bienes y se van a caminar por sus bellas arenas y a Dios gracias nunca ha faltado nada porque también nos ocupamos de la seguridad.
Todo eso por 600 pesos anuales, es decir 1,64 centavos uruguayos por día.
Y por último terminemos con la confusión de los caminos de circa, con los derechos de los ciudadanos de 50- 100- 150 metros de la costa (que los ciudadanos comunes cada día tenemos menos derechos).
Digamos que la legislación es de la época de la colonia, pero aún así y todo, es clara.
Usted tiene derecho a pasar pero no ha detenerse y mucho menos establecerse.
Que quiero decir con esto: de ajustarnos a la ley, en Colón, que digo en Colón, en toda la región de ambos países, de tomar en cuenta esos metrajes todos los camping de Colón y Paysandú (que son las dos ciudades que nos ocupan), son ¡ilegales! Solo pondré 3 ejemplos de cada lado del majestuoso Uruguay, sin contar los arroyos.
Argentina: Los Tilos, 30 metros de la costa, Piedras Coloradas, sobre la playa, Isla del Horno.
Uruguay: Pescadores, YCP y pongamos al azar una casa quinta de la boca del San Francisco.
Si uso entonces mis derechos, voy a cualquiera de estos lugares, instalo mi sillón, mesa, mi barco, una carpa, etcétera, etcétera y me niego a pagar porque me asisten mis derechos al estar dentro de las 50 metros de la costa.
¡Claro!... no me gustaría saber cuánto estaría demorado por las fuerzas públicas.
Mientras yo siga insistiendo que estoy dentro del camino de circa y la ley me ampara.
Basta de confusión y demagogia.
Espero la dignidad y el sentido común, los códigos y la ética que deben ser banderas inclaudicables en los hombres, más, tratándose usted de un hombre público.
Lo invito Sr. Marcelo Tortorella a conocer la realidad de Isla Caridad, informarse y disculparse.
Sr. Marcelo Tortorella, “hay hombres que con sus actos de grandeza demuestran ser hombres y hay otros que solo demuestran que su documento de identidad reza: sexo masculino”. Pedro Bel. DNI 12950490. Domicilio legal: Isla Caridad, Km 208 del Río Uruguay.

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Felicito al Sr. Director de Tránsito por haber hecho los despertadores en la calle Entre Ríos.
Apoyo su construcción en esta misma calle y sugiero dos o tres más, aun sabiendo que a los conductores que respetan las normas de tránsito, estas medidas son incómodas para la normal circulación.
Parece mentira que hayamos tenido que llegar a esto por los energúmenos de siempre, que no respetan los derechos de los demás ni tampoco tienen la hombría de hacer las picadas en los lugares apropiados (pista). En cambio, causan estos inconvenientes donde hay familias descansando y/o disfrutando de un espacio verde, creyéndose que son vivos pero en realidad son unos atrevidos. CI 4.084.971-1

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Estoy disconforme con la resolución de la Intendencia de Paysandú, por haber hecho un decreto que expresa la exoneración del 20% de reempadronamiento de vehículos matriculados en otros departamentos y que por ende, se han desviado los dineros que tanta falta le hacen a Paysandú. Por tal motivo esas personas han obtenido ahorros de hasta el 50% y de los que toda su vida han pagado sus patentes en nuestra intendencia e incluso teniendo flotas de vehículos, ni siquiera se han acordado.
También es justo reconocer que este fenómeno viene sucediendo desde hace varias administraciones, blancas, frenteamplistas y blancas nuevamente.
No es posible que paguen justos por pecadores, ya que con lo que se cobra acá se quiere cubrir lo que se escapa para otro lado, no recuperando ningún peso.
Esperamos que se reconsidere el tema para beneficio del pueblo sanducero que en definitiva, es el gran perjudicado.
CI 4.084.971-1