Rurales | 07 Feb Carlos Salgado, técnico del Secretariado Uruguayo de la Lana (SUL), señaló que el productor está reteniendo sus animales, lo cual se refleja en la faena que ha tenido una caída de 9% con respecto al comienzo de 2010.
“En los dos rubros es muy auspicioso, tanto en la lana como en la carne, con precios muy firmes en alza durante todo el mes de enero. En el mercado de lana se alcanzaron precios récord para todos los niveles de finura. En el mercado internacional, en Australia por ejemplo, superó los 12 dólares el kilogramos de base limpia en el indicador del mercado del este; y en carne ovina, un mercado muy escaso de materia prima reflejó el posicionamiento de los productores a retener, dada las consecuencias de estos precios. Una caída de la faena en el orden del 9%, con una categoría que crece que son los borregos”, dijo el técnico.
Salgado explicó que por ahora China está liderando las compras de carne ovina, aunque Brasil se mantiene como un mercado muy importante en cuanto a precios.
“En las compras de carne en enero está liderando el mercado China, que es comprador de asados, de menudencias, entre otros. Según los datos del Instituto Nacional de Carnes (INAC), que son las referencias que tenemos, no esperamos que se mantenga”.
“Los negocios con Brasil siguen siendo más que atractivos, los precios promedio están en 5.200 dólares la tonelada, lo que también marca que es el principal en materia de precios. Supera precios de la Unión Europea. Insisto, vamos a ver si las estadísticas mantienen a China en primer lugar, yo no creo”, comentó Salgado.
Se dispararon
Los precios de la lana se han disparado, pero los productores locales todavía son cautos a la hora de vender. “Este inicio de año es magnífico para el productor por los valores que está adquiriendo la lana. Hace muchos años que no se ven subas tan espectaculares del orden de los 80 centavos. Viene bien que se entonen los valores”, dijo el presidente de la Cámara Uruguaya de Exportadores y Lavadores de Lana, Ricardo Seiser.
Agregó que “la lana en las últimas décadas no ha acompasado sus valores a lo que son otras materias primas y ahora, frente a la suba de cereales y otros commodities, se está consolidando un aumento en la lana que también arrastra a otras fibras como el algodón”.
Dijo también que los productores tienen un stock de lana pese a que a fin de año había un 70% de la producción comercializada. “Han mejorado los valores, el exterior acompaña y se está colocando mejor, pero no a precios de punta. La gente todavía está dudosa de qué hacer con estas subas tan repentinas”, sostuvo Seiser. Indicó que “el productor tiene derecho de vender cuando le parece” y que no se puede dar un pronóstico a largo plazo. “Hay mucho productor que no necesita el dinero ya y prefiere quedarse con la lana a la espera de una suba aún mayor. Yo, en lo personal, creo que no subirá mucho más, pero el precio está firme porque hay demanda y no mucha oferta”, señaló.