Deportes | 17 Feb Sergio Esquivel mantiene todavía dudas en cuanto a la forma en la que Paysandú le saldrá a jugar el sábado a Artigas. El técnico de la selección sanducera sabe que su equipo está obligado a ganar en casa para intentar en la revancha manejar el trámite y la ansiedad.
“El rival será complicado, teniendo en cuenta que es el último campeón nacional, y hace tres años que viene definiendo el Litoral.
Tiene desde hace años la misma base, por lo que todos se conocen. Pero más allá de todo nosotros sabemos que tenemos que buscar el partido, ganar como locales y después definir allá”, dijo el técnico tras el movimiento de la víspera en el Parque Rivabén.
Esquivel confía en sus jugadores, en lo que se han brindado adentro y afuera de la cancha, aunque es consciente de que “todavía nos falta ensamblar al equipo”.
Por eso será vital la tarea del entrenador a la hora de definir cómo se le jugará a Artigas y cuáles serán los nombres que tendrá a disposición.
“La duda que tengo no pasa por un jugador, sino que está basada en lo que necesitamos para este partido, es decir más marca o más creación de fútbol”, confesó. Esquivel imagina que “Artigas nos va a esconder la pelota, va a venir a buscar la victoria, por lo que más allá del planteo que hagamos será fundamental que no nos traicione la ansiedad”.
El técnico de la selección sabe que un resultado en casa es vital para encarar la revancha con otra tónica. Y asegura que, más allá de lo que haga el equipo en la cancha, “será fundamental el aliento del público, que seguramente le pasará la presión al rival”.