Locales | 06 Mar En el año 2007, siendo presidente de la República Tabaré Vázquez, fue inaugurado el Banco de Tumores “y nos entregó dinero, un millón 93.000 pesos por año durante dos años para todos los gastos, es decir insumos, los cuatro funcionarios que son pagos, y con ellos y los que trabajan gratis se echó a andar el banco”, señaló a EL TELEGRAFO el Dr. Carlos Sarroca.
“El resultado fue que para este año tenemos más de doscientos tumores guardados, más de quinientas personas estudiadas, y nos encontramos en la situación de que siguiendo lo que había solicitado el presidente en ese momento, nos presentamos al Ministerio de Defensa, porque el Hospital Militar depende de este ministerio y tiene los recaudos necesarios para que no se pueda perder ese material, que no tengamos falta de nitrógeno, oxígeno ni electricidad, además de aislación suficiente”.
“El banco marchó hasta ahora”, observó, pero sucedió que el presidente actual eliminó todos los contratos de obra. En este caso los cuatro funcionarios estaban contratados bajo esta figura, incluyendo los biólogos moleculares y los anátomo patólogos, a los que se estaba pagando doce mil pesos mensuales, es decir menos que a los presos para limpiar las calles”.
“A estas personas hace más de dos meses que no se les paga, y por otro lado nos quedamos sin el dinero suficiente pese a que nos presentamos ante el Ministerio de Defensa Nacional solicitando que para el presupuesto fuéramos incluidos con dos millones de pesos para cubrir exactamente los gastos de funcionamiento a cinco años”.
Lamentablemente, quienes elaboraron el presupuesto de Defensa, “sin mediar ninguna explicación nos borraron del presupuesto” y pese a las entrevistas solicitadas al ministro nunca se explicó “porqué nos fue negada la entrada a ese presupuesto”.
Se recurrió al Parlamento, ante la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados y Senadores, “y de esta última, sin explicación ninguna, no tuvimos ninguna respuesta y fuimos quitados del presupuesto nacional”.
“Como no nos dimos por vencidos fuimos a hablar con el ministro de Salud Pública, para ver si tenía interés en esta investigación y no tuvimos tampoco contestación”, lamentó el profesional, visiblemente conmovido por el destrato al que ha sido sometida esta obra y los profesionales que integran el equipo, “lo que perjudica a la población uruguaya, a la que le están negando una posibilidad de prevención del cáncer, que es una de las principales causas de muerte”.