Cancilleres de Uruguay y Argentina
se reúnen por demoras en los puentes

Locales | 13 Mar Mientras los cancilleres de Uruguay y Argentina se reunirán el 16 de marzo para definir qué medidas tomar como precaución para evitar que vuelvan a producirse en Semana de Turismo las demoras que hubo en los puentes internacionales de Paysandú y Fray Bentos al finalizar el asueto de Carnaval, el director nacional de Migraciones, José Chavat, dijo que el problema no se soluciona con más personal sino que es necesario actualizar el sistema de cabinas para optimizar los recursos que la reciente ley de Presupuesto asignó al sistema de control en la frontera entre Uruguay y Argentina.
El pasado martes los turistas que pretendían volver a Argentina por el puente General San Martín tuvieron esperas de varias horas al formarse una fila de 9 kilómetros de automóviles, mientras que en el puente internacional General Artigas, la cola fue de unos 3 kilómetros en su momento máximo.
El ministro de Turismo, Héctor Lescano informó que “el tema de coordinación y facilitación del paso de frontera, especialmente en momentos críticos, será tratado por el ministro Almagro en la reunión que tendrá con su par en Buenos Aires, preparatoria de la segunda reunión en Anchorena que mantendrá el presidente José Mujica y la presidenta argentina Cristina Fernández”. La idea del encuentro de ambos cancilleres es lograr tomar precauciones ante la inminente llegada de Semana de Turismo, momento en el que podría repetirse la situación del pasado martes. Agregó que para solucionar el problema suscitado al finalizar el feriado de Carnaval estuvo en contacto con el ministro Bonomi y con Rosadilla, quien tiene competencia en los pasos de frontera, a los efectos de “compartir la inquietud respecto a los problemas suscitados en el puente General San Martín, donde miles de vehículos tuvieron una larga espera para cruzar la frontera”.
Dijo que se habían tomado “precauciones” pero “el mecanismo requiere una tarea de coordinación muy fuerte en relación a las direcciones de Migraciones de ambos países. Este enlace fue entablado, y el ministro Bonomi asumió la responsabilidad de facilitar el paso”, agregó al referirse a la decisión de pase libre para destrabar la situación.
“A pesar de la disposición y el apoyo logístico de varias instituciones, el problema no pudo ser resuelto y se formó una larga espera en el puente que une Uruguay y Argentina”, reconoció.
El jerarca reiteró que en gran medida esta situación “es el resultado de un cambio abrupto de escenario donde en enero de 2010 pasaron por el puente 1.070 personas, mientras que en enero de este año cruzaron 93.700 personas. Este es el motivo por el cual todas las precauciones que se puedan tomar quedan cortas frente a lo que es una verdadera avalancha”, añadió.
CABINAS Y DOCUMENTO MERCOSUR
Por su parte, el director nacional de Migración, José Chavat, advirtió en declaraciones a El Espectador que “es imposible aumentar la capacidad de personal trabajando, ya que la capacidad física que hay no da lugar a ampliar los servicios que tenemos”. Explicó que no están adecuadas las cabinas al nuevo equipamiento existente y, en consecuencia, el viajero debe bajarse del auto y entrar con su familia a las oficinas centrales, cuando podrían hacerlo sin bajarse al pasar por cabinas similares a las de un peaje.
Agregó que la nueva ley presupuestal destinó nuevos recursos para la tarea, desde equipos informáticos de última generación hasta un refuerzo de personal, pero “el Estado uruguayo no puede tener un servicio por un día pico”, enfatizó.
“El problema de infraestructura que tenemos en ese paso es que, después que se abrió el puente, aún no están adecuadas las cabinas por donde se podría hacer el control de igual forma que el pasaje. Están hechas para el trabajo que se hacía hace cinco años. Hoy que tenemos todo informatizado, las cabinas han perdido su actualización”, dijo Chavat. Reclamó que pasaron 20 años de implantado el Mercosur y todavía no tenemos un documento único. “Si eso existiera, los trámites serían más rápidos al pasar por la frontera”. De todas maneras, relativizó el problema en cuanto a que a la Unión Europea le costó 20 años solucionarlo, dando a entender que hay que tener paciencia.
“Estamos preocupados por lo que pasó el martes. La situación se nos fue de las manos y se nos hizo muy difícil dar respuesta a esa cantidad de gente que visitó el país y salía del Uruguay”, dijo Carámbula. “Los turistas de ahora nos visitan cada vez más, vienen de todas partes del mundo y tenemos que tener la capacidad de darles respuesta porque son muy exigentes”, añadió.