Edila Nelda Teske

Locales | 05 Abr En planteo que fue aprobado y está radicado en la Comisión de Higiene y Medio Ambiente de la Junta Departamental, y además elevado a la Dirección de Higiene de la IDP, la edila nacionalista Nelda Teske asegura que hay un tema que “golpea nuestra sensibilidad y es la falta de pulcritud en las calles, plazas, playas, en los lugares públicos en general. Se trata de espacios usados por ciudadanos que no los cuidan ni los mantienen como si fueran sus propios hogares. Esto no es difícil, se trata de un pequeño esfuerzo, de esmerarse algo más. Empecemos por los papeles, bolsas, botellas y otros envases plásticos que diariamente encontramos en las aceras y calles. Alguien los arroja en vez de dejarlos en su bolso, mochila o bolsillo hasta llegar a su domicilio, para descartarlo allí”.
Respecto de los residuos domiciliarios, la edila afirmó que con frencuencia “se dejan en el cordón de la vereda, no siempre con bolsas bien atadas. Recordemos que si se pueden dejar a cierta altura, se evitarán los destrozos por los perros que deambulan a toda hora por las calles. Por supuesto --agregó-- ni así se salvan de la revisación a la que están sujetas por los recolectores ‘no oficiales’, los de los carritos. A ellos también nuestra solicitud de colaboración con el mantenimiento y cuidado de la ciudad, pero ayudémosles facilitándoles la selección. Ésta se logra usando bolsas separadas para residuos orgánicos y no orgánicos. Tenemos la ventaja de que muchos comercios del ramo alimenticio, en especial las fruterías, usan para su expendio bolsas de color azul, verde o gris. Si a ellas las usamos con elementos orgánicos: cáscaras, yerba, sobrantes de comida, bolsitas de té, etcétera, y a las bolsas negras o blancas de los supermercados para los inorgánicos, estaremos colaborando con una larga y engorrosa tarea, evitando que esos desperdicios sean desparramados en nuestras calles”. La edila Teske también refirió a “los elementos altamente contaminantes como pilas, tintas y partes de impresoras o de aparatos en desuso, medicamentos vencidos, los que jamás deben ser mezclados con los restantes residuos. Para ellos se deben emplear bolsas rotuladas (simplemente escribir afuera lo que contienen), incluso las pilas son recibidas en algunos comercios para luego llevarlas a lugares adecuados. No olvidemos otros contaminantes: los aceites usados en la cocina, los que una vez fríos se pueden verter en botellas plásticas a fin de evitar obstrucciones de la cañería y contaminación”.