Nacionales | 12 Abr mientras se realizaban tareas mantenimiento en el oleoducto del Este (José Ignacio-La Teja), produjo un derrame que fue controlado pocas horas después. La estimación del volumen del derrame es de 100 metros cúbicos, de los cuales Ancap informó que recuperó el 95%. El ente también anunció que remediará los daños ambientales del terreno baldío afectado y que el petróleo llegó al agua del arroyo Solís Grande en cantidad ínfima. Hasta anoche se continuaba con las tareas de limpieza.
Ancap informó en la víspera que el viernes 8 sobre las 18, al realizar una maniobra planificada de mantenimiento en el oleoducto José Ignacio-La Teja, se rompió una manguera nueva de goma y se produjo un derrame de petróleo. Técnicos afirmaron que el oleoducto no sufrió desperfecto alguno. El presidente de Ancap, Raúl Sendic, dijo que se está evaluando traspasar los costos producidos por el derrame de petróleo a la empresa proveedora de la manguera que ocasionó el desperfecto. Sendic aclaró así que el incidente no fue producto de una falla del procedimiento, sino de una herramienta nueva. Era la primera vez que se usaba la manguera de goma que se rompió.
La ministra de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Graciela Muslera, destacó que el desastre ambiental se evitó por una eficaz coordinación entre distintas instancias estatales. La jerarca recordó que Prefectura ha venido retomando la práctica de ejercicios ante situaciones de emergencia, y que ese factor fue fundamental en esta ocasión. “Se requiere un adiestramiento constante y un control de los equipos para que en el momento que se suscite la emergencia las capacidades no fallen”, explicó. Funcionarios de Prefectura aislaron primeramente la mancha de crudo que había llegado al río y luego, junto a personal de las intendencias de Canelones y Maldonado, trabajaron en su extracción mediante barométricas, disponiéndolo en tanques de Ancap.
La Dirección Nacional de Medio Ambiente (Dinama) y la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) “han venido efectuando constantes inspecciones para constatar los alcances del accidente, y continúan realizándolas”, señaló. “En principio no se afectó la fauna, pero sí la flora de un área de 20 metros lineales de la costa donde sucedió el derrame”, admitió Muslera.