Roberto kreimerman

Locales | 15 Abr “Educación, investigación y apoyo a las industrias para su competitividad”. Así resumió a EL TELEGRAFO el Ministro Roberto Kreimerman el papel que deberá jugar en la región el nuevo laboratorio del “Polo agroalimentario y agroindustrial litoral oeste” que se presentó ayer.
El polo de desarrollo que se está implementando, “está dirigido a tres factores, la formación de recursos humanos, que la gente pueda tener una especialización tecnológica importante; en segundo lugar la investigación, que no es abstracta, está relacionada a las agroindustrias y le da valor, que puede ser por procesos o por productos de más alta consideración para el mercado. La investigación básica y la investigación aplicada es fundamental. El tercer punto es el uso por parte de las industrias de las capacidades de control industrial, analíticas. Porque vienen creciendo las exigencias en los mercados internacionales. Como por los acuerdos mundiales ya es muy difícil establecer barreras arancelarias, es muy frecuente la erección de barreras para arancelarias. Desde las más bruscas como las licencias no automáticas hasta las más sutiles”. Para el ministro esas barreras “implican avances tecnológicos necesarios para la conveniencia de la salud de los consumidores”.
Centro de excelencia
Destacó también que “la participación del Ministerio de Industrias fue importante, en la medida que además pueden darse los planes de negocios, la inversión que hizo la Universidad, el contacto con los empresarios en una zona norte que implica el 25 por ciento de la producción agroindustrial del país. Por ahí viene el camino, el mundo hace necesario este tipo de centro de excelencia. No es la única experiencia que hay en el mundo, de hecho Uruguay se integra así a un grupo de países que lo que ven es que tienen que aprovechar sus ventajas naturales pero no dejarlas solamente así, sino que debe agregarse capacidad e inteligencia”.
Sobre si el centro de investigación universitario también podrá trabajar para el sector agroindustrial argentino, en esta misma región, Kreimermann dijo que “sin duda que sí. También la industria nacional uruguaya está utilizando mucho los servicios del LATU, pero también contrata servicios en la Argentina”. Explicó que esto se da “porque la ciencia está muy segmentada, lo que es mejor porque se especializa. Y un centro específico de investigación se hace fuerte en determinado aspecto científico, el resto de la región lo utiliza. Y como países medianamente desarrollados que somos -porque es la zona media del mundo, hay países mucho más pobres y otros mucho más ricos- tenemos que buscar la complementariedad porque no podemos poner dinero en todas las cosas. Esto implica cierta especialización, y eso me lleva a la respuesta de la utilización de la región de estas capacidades”.