Carlos Artía

Rurales | 24 Abr Las lluvias han sido muy positivas para el sector agropecuario, y en especial para el sector ganadero. “Hace tiempo que no se veía correr el agua por las cañadas”, dijo a EL TELEGRAFO el productor Carlos Artía, quien sostuvo que “es increíble cómo en estos momentos de plena encarnerada y con las lluvias del primer domingo de Semana Santa, se movió el celo en la majada, notándose claramente los cambios que causa el verde en los campos”.
Entiende que el agua en la entrada del invierno “es muy importante”, y consideró que más allá de la seca del verano, “hasta marzo no veníamos tan mal. Recién se complicó a partir de fin de marzo, se agravó bastante –más que en enero--, pero ahora cambió. El estado del ganado es muy bueno, fundamentalmente aquellos que tienen sanidad y van ganando kilos en forma importante”, acotó.
En esta época es normal que las temperaturas sean más bajas de lo que ocurre actualmente. Recordó lo que sucedía el pasado jueves a la media mañana, “con una cerrazón bárbara que mantiene la humedad, por lo que esperamos que el invierno no llegue tan temprano y nos deje acomodar un poco”.
De todas maneras reconoció que la falta de agua para la oveja “es un beneficio bárbaro y se apreció claramente en la seca de verano”. Indicó que los dos baños contra la sarna que “tuvimos que dar en la primavera pasada le dieron una paliza bárbara a la majada, pero después que se recuperó de esa cambió en muy buena forma”.
Se mostró sorprendido por cómo “el golpe del baño le marcó en la fibra de la lana, pero por suerte está firme y si cinchás la lana se mantiene firme”.
Cambios
En una zona muy alejada de la urbanización, Artía sigue insistiendo en solucionar los problemas que aquejan a los productores de la zona. Recientemente se instaló la energía eléctrica, lo que fue considerado como un gran paso, pero ahora resta aguardar que se solucione la problemática de la caminería interna. Sobre la caminería señaló que “es un tema fundamental para la producción, fundamentalmente cuando dependés de un embarque de ganado para sacar la lana de tu establecimiento, y tenés que esperar que la naturaleza te lo permita y poder ingresar el transporte a esos caminos”.
Reconoce que “no es un tema fácil de resolver, en especial en caminos como el que va a mi establecimiento, que es muy quebrado y tiene partes con poca tierra, pero cuando tiene tierra es bravo pasarlo”. Sobre las lluvias del pasado miércoles, dijo que “llovió bastante y logré pasarlo porque lo conozco, pero otra persona se vería en serios problemas”.
“No veo a la Intendencia con capacidad de resolverlo por ahora”, precisó. De todas maneras, ve viable la posibilidad de hacer con la caminería de la zona, algo similar al emprendimiento de 62 productores de la zona, que lograron concretar la energía eléctrica en sus casas, a través de un trabajo en conjunto.
Artía sostiene que “lo ideal sería buscar un entendimiento entre vecinos y la Intendencia de Paysandú. Si no nos juntamos creo que va a ser imposible resolverlo, por lo menos en los caminos en donde vive poca gente”. Como ejemplo, dijo que para llegar a su establecimiento “se debe ingresar en el kilómetro 134 de la ruta 26, y de ahí hacia el norte otros 16 kilómetros, a escasa distancia del límite con el departamento de Salto”.
“Tal vez sean apenas unos 3 kilómetros de a tramos los que habría que solucionar”, pero entiende que “es una caminería que debería trasladarse 150 kilómetros, que es la distancia de mi casa a Paysandú”. Manifestó como ejemplo, que “tengo 3 camiones de leña, y me sale más caro ver un camión y pagarle un flete a Paysandú para venderlo, que lo que me pagan por la leña”.
Electrificación
Artía indicó que el grupo continúa reuniéndose para tratar diversos temas. “Días atrás le adquirimos unos cascos a la policía para que pudiera utilizar las motos que donamos el año pasado –las cuales hasta ese momento no estaban siendo utilizadas--, además de colaborar con la Seccional 1ª que tenía problemas con una heladera”.
Pero también se refirió a los avances tecnológicos. “Por un lado poder sentarnos en el momento de descanso a ver televisión y a través de los informativos capitalinos enterarnos de las principales noticias. Pero también, lograr esto que ocurre en el momento de la entrevista con EL TELEGRAFO, estar en el medio del campo juntando ganado y poder comunicarnos cómodamente a través del celular”. La obra de electrificación rural permitió la instalación de un mayor número de antenas para telefonía celular, cambiándole la vida a mucha gente de la zona.