Nacionales | 21 May “Sensación de derrota”
La ola de comentarios de ayer refieron a cómo el fracaso de la anulación de la Ley de Caducidad puede afectar al Frente Amplio. La senadora oficialista Constanza Moreira dijo que el partido sale dañado del proceso que llevó al fracaso de la iniciativa y que se debe analizar lo actuado por Víctor Semproni y Jorge Saravia. “Es la crónica de una muerte anunciada”, dijo Moreira a Océano FM. Para ella, en el proceso hubo señales “muy claras” de que el gobierno no quería este proyecto. “La sensación hoy mismo, por más que todos los que trabajamos por la ley interpretativa busquemos alternativas, es de derrota”, admitió la senadora, una de las principales defensoras del texto interpretativo de la Ley de Caducidad que este viernes naufragó en Diputados. Recordó que el constitucionalista socialista José Korzeniak elaboró el texto interpretativo para lograr consenso pero una vez aprobado en el Senado, “el vicepresidente Danilo Astori hace un anuncio en El País respecto a que preferiría otra solución, luego el presidente va a Diputados y no asume el costo político de decirle que no voten pero da su mensaje” en contra, afirmó.
También dudó del énfasis que de verdad puso el presidente José Mujica en la reunión con Semproni. Según se dijo, en esa reunión Mujica le pidió al diputado que votara el texto interpretativo. “Si el presidente le hubiera mandado enfáticamente al diputado a votar la ley, no tengo duda de que Semproni hubiera votado la ley”, agregó. Para Moreira, “el gobierno, con la saludable excepción del canciller Luis Almagro, desnudó una y mil veces su desacuerdo con esta ley. Asamblea Uruguay y el MPP llevaron al Frente Amplio la llamada ‘solución Risso’, es decir que ya no creían en esta solución”.
“Queda dañada”
Moreira Opina que el partido deberá enfrentar un análisis interno y desde sus estructuras. Si bien destacó que el Plenario se comportó “dignamente” porque es “muy duro” para un partido enfrentar la posición de sus máximas autoridades, afirmó que “la fuerza política queda dañada”. “Yo creo que el comportamiento de Semproni, como el de Saravia, tendrá que ser examinado con mucha justeza por el Frente Amplio. El partido tiene mayorías muy justitas para aprobar los proyectos en el Parlamento, en Diputados se ve que las mayorías son aún más justitas, y las bancas no pueden ser usadas como vetos, como un chantaje para impedir una votación”, sostuvo. Para la senadora Moreira, el partido pierde fuerza para dirigir a sus legisladores: “Luego que un mandato imperativo es desacatado por senadores y por diputados, qué instrumento, qué fuerza va a tener el Frente Amplio para imponer cualquier cosa (a sus legisladores). Si yo no tengo la fuerza para que, tomada una decisión, los legisladores se alineen, lo que pasa ahora con la ley de Caducidad, mañana pasará con otras cosas”, señaló.
“Se salvó de vuelta”
Por su parte, el politólogo Adolfo Garcé opinó que la situación le dejó “con la sensación de que Mujica se salvó de vuelta”. Recordó que Mujica “se escapó dos veces de la cárcel de Punta Carretas, con poco tiempo de diferencia. El año pasado también se salvó en el Senado cuando tres senadores, entre ellos dos mujiquistas --o que al menos lo eran en ese momento-- (Eleuterio) Fernández Huidobro y Jorge Saravia no levantaron la mano y Mujica escapó. Y ayer (por este jueves) Semproni se fue de sala y Mujica volvió a escaparse”, dijo a radio Carve. Para Garcé, “los senadores y Semproni le dieron una nueva oportunidad de llevar la política hacia las Fuerzas Armadas y hacia el pasado en la dirección que Mujica prefiere”. Según el politólogo, si se hubiese aprobado el proyecto, “el liderazgo de Mujica hubiese quedado profundamente afectado”. “Si no fuera porque Semproni se mantuvo firme, hoy estaríamos recogiendo los pedacitos con una escoba del liderazgo de Mujica, de su liderazgo presidencial quedaría poco y nada”, advirtió el experto.
Molestos con Borsari
El debate en la Cámara de Diputados por la Ley de Caducidad no solo dañó la interna frenteamplista. También hubo daños colaterales en el Partido Nacional. La intervención del diputado Gustavo Borsari en la sesión generó molestia en su bancada. Según pudo saber Últimas Noticias, como miembro informante por la minoría, el legislador debía limitarse en su discurso a exponer los cuestionamientos técnicos y legales al proyecto interpretativo y dejar a sus compañeros las consideraciones políticas, tal como habían acordado. No obstante, Borsari se “salió de libreto” y efectuó un ataque directo al Frente Amplio y al gobierno, con alusiones directas al pasado del movimiento tupamaro y a la actitud de la izquierda en la salida de la dictadura. Es más, cuando realizaba esas afirmaciones, una funcionaria de la bancada herrerista le advirtió que estaba quebrando el acuerdo. Pero Borsari suspendió su discurso y la increpó: “¡Callate porque si no vamos muertos!”. Después pidió el retiro de sala de todos los funcionarios parlamentarios, lo cual no fue aceptado por el presidente de la cámara, Luis Lacalle Pou. Pero la historia no terminó ahí. Finalizado su discurso, Borsari y Lacalle Pou mantuvieron una fuerte discusión en la antesala de la cámara.