Ex consejero de Secundaria, Jorge Carbonell

Locales | 24 May Para el ex integrante del Consejo Directivo Central (Codicen) y ex consejero de Secundaria Prof. Jorge Carbonell, la situación que se plantea actualmente en la enseñanza está dando la razón a los términos en que fue concebida la Reforma Rama, “a la que muchos se opusieron en aquel entonces”, es decir sobre 1995-1996, cuando Carbonell precisamente integraba los órganos de conducción de la enseñanza. Al evaluar para EL TELEGRAFO el panorama en este sector, dijo que “en aquella época había problemas muy serios. Se hizo un intento muy importante con la acción que comandó Germán Rama, y en aquel momento yo estaba en el Consejo de Educación Secundaria y traté de colaborar todo lo posible. Fue una lástima, y mucha gente que lo combatió muy fuertemente a él y a los que estábamos con él en aquel momento nos está dando la razón en muchas cosas ahora, cuando han transcurrido quince o dieciséis años”.
Destacó Carbonell que “llevábamos estadísticas en ese momento y por ejemplo la repetición en Secundaria era muy alta, y una de las respuestas fueron los liceos piloto que se plantearon en ese momento, en la llamada reforma Rama, el plan 96. Uno de los primeros liceos que tuvo ese régimen empezó a funcionar en Paysandú en el Liceo Nº 5, en la zona portuaria, que ahora está funcionando en los fondos del Liceo Departamental”.
Consideró que “realmente se había logrado bajar muy fuertemente la repetición sin bajar la calidad, porque como docente o administrador de la enseñanza me daría vergüenza mejorar el rendimiento cambiando el régimen de evaluación. Lo que todos queremos, según creo, es que todos los alumnos sepan más. El régimen de evaluación se puede adecuar, pero me parece que lo que se ha planteado públicamente para el año que viene respecto al régimen de evaluación y pasaje de grado adolece de problemas muy serios y de una flexibilidad que va a llegar a una permisividad en que los alumnos van a salir sin saber nada”.
Desde primaria
Expuso asimismo que “los uruguayos queremos y respetamos mucho a Primaria, a lo que yo me sumo. Tiene una conformación administrativa muy buena y todos le debemos un enorme respeto, pero debemos decir que empieza a tener problemas ya Primaria porque los niños están saliendo de la escuela en este momento sin leer correctamente, por ejemplo”.
“Hay múltiples problemas, y quiero agregar que los alumnos de Primaria salen mal preparados y como dijo Germán Rama en uno de los estudios, en Secundaria en lugar de avanzar se atrasan, porque en Secundaria la cosa está muy mal, y honestamente siento que cada vez está peor”, significó Carbonell.
“Así, en Montevideo, en primer año del Ciclo Básico los liceos diurnos tuvieron en 2010 un 42 por ciento de repetición, lo que es un disparate y hay que ir tomando acciones muy rápidas en ese sentido. Pero la cosa no pasa por dejar pasar al 75 por ciento en lugar del 58, sino que la cuestión es que el 75 por ciento aprenda correctamente lo que tiene que aprender, porque en algún momento van a enfrentar la hora de la verdad”, sostuvo el ex consejero.
“Hace muchos años que la Universidad ha planteado tests de ingresos, --no exámenes-- que son anónimos, a efectos de una evaluación, y dan resultados realmente muy malos. Hay mucha cosa que ajustar, porque a mi criterio hemos tenido una muy mala Ley de Educación”, sostuvo.
“Yo siempre he tenido relaciones normales con los gremios y soy un defensor de la existencia de los sindicatos, pero me parece que éstos tienen que cumplir su labor fuera de la administración, porque en la administración es otra cosa. No estoy de acuerdo con que se elija parte de las autoridades por el sindicato. Entiendo que éste tiene que tener la libertad de hacer y decir lo que le parezca; lo respeto, aunque muchas veces discrepe”, reflexionó.
“Hay que abrirse”
“Pero están restringiendo cada vez más las posibilidades de acceso a las personas a ser autoridades de Secundaria, porque hay que ser docente, hay que tener una cantidad de años de trabajo, y se va achicando el grupo de los elegibles y se está siguiendo un camino que me parece que es equivocado. Hay que abrirse, hay que escuchar otras opiniones, y los programas, cuando se hacen, se debe atender la demanda de la población. Acá estamos haciendo una falsa oposición desde hace tiempo, en que una cosa es educar para el trabajo y otra cosa es educar para la vida. Yo pienso que el trabajo es la vida y la vida es el trabajo y más aún en la actualidad”, sentenció Jorge Carbonell.