INVESTIGACIÓN DE LA SECCIONAL TERCERA

Policiales | 10 Jun Un empresario del rubro gastronómico sanducero fue procesado por la Justicia por suministrar cocaína y mantener relaciones sexuales con menores, una de ellas interna de una dependencia del INAU.
En base a información de carácter extraoficial recabada por EL TELEGRAFO, se supo que desde hacía cierto tiempo personal de la Seccional Tercera investigaba un caso de prostitución de menores y consumo de estupefacientes en el que estarían involucradas jovencitas de entre 14 y 15 años --entre otras personas--, las cuales brindarían servicios sexuales a hombres en sus domicilios, por un precio de entre 800 y 1.500 pesos. Asimismo, se sospechaba de una joven de 22 años que oficiaría de nexo entre los clientes y las jóvenes.
LA INVESTIGACIÓN
Contando con varios datos, la Policía concurrió a una dependencia local del INAU e indagó a una jovencita de 15 años, que habría expresado que conoció a la mujer de 22 años en el Hogar Femenino, cuando ésta fue a visitar a otra interna. En esa oportunidad, la mayor la habría invitado a su casa en la zona Este, permitiendo que las adolescentes pernocataran allí algunas veces pero obligándolas a prostituirse a cambio de alojamiento y comida.
En tanto, al indagar a otras involucradas, se logró precisar que la mujer les había presentado a varios “clientes”, los que ofrecían “buena plata”, señalando como uno de los más asiduos al dueño de una pizzería, de iniciales C.W.C.
Habrían contado que en más de una oportunidad iban a la casa del empresario y que al llegar, éste cerraba la puerta y escondía el control (ya que era con sistema electrónico).
Además, habrían dicho que les pagaba entre 1.500 y 2.000 pesos a cada una de las jóvenes, pero que ese dinero era “manejado” por la señora que las llevaba.
Respecto al consumo de cocaína, habrían contado que el dueño de casa consumía y compartía con ellas, utilizando un billete de un dólar para inhalar luego el polvo.
Los encuentros solían ser sobre la medianoche y en la madrugada. Incluso, muchas veces se habrían quedado en la casa del ahora procesado.
Por su parte, fue detenida la joven de 22 años señalada como la “madama” de las muchachas. Habría narrado que en varias oportunidades fue a la casa del empresario, dando incluso detalles del interior de la edificación, pero que concurrió sola y que solo conocía a las menores de vista, ya que cuando ella llegaba las chicas se retiraban. A la vez, negó toda imputación en su contra.
ALLANAMIENTO Y DETENCIÓN
Personal de la Seccional Tercera se presentó en el negocio del señalado como cliente y lo trasladó luego a su finca a fin de realizar una inspección. Una vez en el interior de la casa, se constató que los datos señalados por los indagados concordaban.
Trasladado a la comisaría, C.W.C. habría admitido que cuando consumía cocaína mantenía relaciones sexuales con varias mujeres, pero que debido a su estado desconocía si eran menores. Además, habría contado que pagaba por los servicios recibidos pero que más de una vez debió estar atento, ya que ellas le robaban elementos de su casa y dinero.
Elevadas las actuaciones a la Justicia, se resolvió que el empresario permaneciera detenido y los indagados fueran emplazados, en el caso de las menores con sus responsables a cargo.
Tras tomar declaración, la jueza subrogante de Segundo Turno, Silvia Vespa, dispuso el procesamiento con prisión de C.W.C. por un delito continuado de suministro de estupefacientes especialmente agravado en reiteración real, con un delito continuado de retribución o promesa de retribución a personas menores de edad para ejercer actos sexuales, de acuerdo a los artículos 54, 58 y 60 del Código Penal, 34 y 36 del Decreto Ley 14.294 con las modificaciones de la Ley 17.343 y artículo 4 de la Ley 17.815.